De acuerdo a uno de los artículos publicados en la revista se explica que la defensa personal, en la que se utilizan distintas artes marciales, es una técnica defensiva y no de ataque.
Lejos de ser un conjunto de trucos fáciles y de resultados sorprendentes, la autodefensa es una técnica difícil, se señala. Hay que aprenderla metódicamente, partiendo de bases sencillas y siguiendo una progresión lógica. Se aclara que contentarse con un aprendizaje superficial equivaldría a exponerse a crueles desilusiones.
El sensei Carlos Gutiérrez en este mismo escrito explica que la defensa personal son los conocimientos que posee un individuo para protegerse en su integridad física contra cualquier tipo de agresión hacia su persona.
Por ello, la defensa personal puede aplicarse en cada caso extraída de diferentes métodos de lucha como son el karate do, aikido, boxeo, savate, tai-boxing, lucha grecorromana, lucha libre, jiu-jitsu, yoga y meditación zen.