Podés aplicar el bordado para decorar cenefas, mantelerías y otros tipos de tejidos y dibujos. El más tradicional de los bordados es el punto cruz. Es de las formas de bordado más antiguas que se conocen, se han llegado a encontrar telas con este sistema de bordado en excavaciones arquitectónicas que datan del 500 a.de C., en Egipto, o en Asia Central.
ALMOHADONES
Desde los punto cruz hasta los de bordados más simple. Podés elegir fondos blanco y aplicar bordados de colores para resaltar el dibujo.
Bordados estilo indio con aplicación de distintos géneros y espejos.
Almohadones de distintos tamaños realizados en género, con vainillas o con ilustraciones en punto cruz.
CUADROS
No es necesario sacarles el bastidor. Esta es una idea muy original que aparte de quedar divino, ahorrás el costo del marco.
Podés hacerlos de varios tamaños y agruparlos en cabeceras de camas o sobre el respaldo de sillones.
También podés realizar varios cuadros de distintos motivos de una misma temática.
COLCHAS, TOALLAS Y SÁBANAS
En todos los elementos de blanco el bordado aporta una delicadeza indiscutida. Los fondos claros son ideales para resaltar las obras de arte de nuestras abuelas.
MANTELERÍA
Otro clásico, que viste una mesa y da un toque de distinción, aunque la vajilla no sea de porcelana, ni las copas de cristal.
CORTINAS
Si querés darle vida a un espacio, pero no podés destinar mucho presupuesto para remodelarlo, con solo poner unas cortinas bordadas cambiarás la estética y la visual de cualquier ambiente.