Increíble, pero real. Hacía mucho tiempo que Mendoza no presentaba un seleccionado con nombres importantes en el “más argentino de los campeonatos” y esa ilusión de poder emparejarse con las potencias se vio una vez más trunca, con pérdida de categoría incluida.
Si, la Borravino sumó su cuarta derrota en Santa Fe y de esa manera tiene que jugar regionales el próximo año para retornar al círculo privilegiado.
Nadie se imaginó un desenlace como éste, en pleno proceso de recambio generacional, pero con apellidos que comenzaron hace un par de años a hacerse respetar a nivel nacional. Sin embargo, el quinteto de Fernando Minelli ayer jugó su peor partido en el 88º Campeonato Argentino de Mayores y se fue al descenso tras caer derrotado con su similar de La Rioja.
Desde el comienzo, Mendoza equivocó los caminos, forzó demasiados sus lanzamientos y en su propia pintura estuvo demasiado light para defender el juego perimetral de los riojanos, quienes con Toni Campos (3 triples y goleador de la primera mitad con 20 puntos) y Mateo Rodríguez (3/4 de tres puntos) se fueron al descanso largo con una ventaja por más tranquilizadora: 52-34.
El inicio del complemento encontró a un equipo mendocino más firme en defensa y conciso en ataque, por lo que achicó la brecha y se ilusionó con una remontada histórica: 64-56. En los 10’ finales, la Borravino se puso más cerca: 67-60. Había comenzado una historia nueva con 7’ por delante.
La heroica estaba próxima. Con algo más de 3’ de acción, Mendoza se había puesto 73-69 abajo, pero el mal primer tiempo que tuvo lo privó de que pudiera terminar de dar vuelta el trámite y al mostrarse cansado, La Rioja recompuso su andar en el cierre y pudo conseguir una victoria importante para seguir en la división de honor. Mendoza en tanto, fue con otra meta, pero tuvo un inesperado descenso.