Alfredo Berti tuvo un arranque espectacular, batiendo récords en los torneos cortos en ese Newell’s de 1993, que venía de ser campeón bajo la conducción del Tata Martino.
“El sistema es el que han estado utilizando en este último año y medio, ya que es un planteo que me gusta y que considero que, tanto los jugadores como nosotros, estamos convencidos de que no hay que cambiarlo”, anunciaba Berti a su arribo a la Lepra. Nada iba a cambiar y arrancó con todo.
En las primeras 11 fechas, ganó 8, empató 2 y perdió sólo 1. Fue una racha que enterró rápidamente la palabra transición y puso a Newell's, con 26 puntos, arriba de todos. Además, logró esa condición manteniendo los rasgos generales del estilo basal que legó Martino, sumándole algún grado mayor de verticalidad y de menos pruritos en las situaciones de inicio.
En la segunda mitad, Berti no pudo dar bríos al equipo luego de la derrota en el clásico (12ª jornada). Ese golpe fue un mojón divisor. Hilvanó un lapso de 8 cotejos sin victorias (5 igualdades y 3 caídas) que atentaron contra las chances de bicampeonato. Cosechó 5 puntos de 24, aunque la tremenda chatura del torneo le regaló posibilidades hasta la última fecha en un torneo que terminó perdiendo a manos de San Lorenzo.
Ese brillante equipo nos dio el parámetro para entender qué pretende el Loco y qué características deben tener los futbolistas en cada uno de los puestos. De esta manera nos animamos a armar un once titular ideal intentando desviarnos lo menos posible de los fundamentos del DT y de las condiciones de los futbolistas que él usó y en los puestos que los utilizó. Jugadores rápidos, talentosos, de buen pie y de gran compromiso con la idea. Este equipo ya conoce el 4-3-3 que no le dio buenos resultados a Astudillo. Ahora, el dibujo tendrá revancha.
Arquero:
Nahuel Guzmán: Técnico con los pies; pecó de exceso de confianza. (NOB)
Cristian Aracena: Da tranquilidad con los pies. Sólo se equivocó con Brown (CSIR)
Defensores:
NOB
Marcos Cáceres: Velocidad, llega al fondo. Le pega con las dos piernas.
Gabriel Heinze: Sobrio, firme en la marca aérea. Personalidad. Experiencia.
Víctor López: Tremendo poder aérero en ofensiva. Rápido, zurdo.
Milton Casco: Firmeza en la marca, capacidad para asociarse. Desequilibrio.
CSIR
Luciano Sánchez: Agilidad, maneja las dos piernas. Apego a la marca.
Yeimar Gómez Andrade: Pasa un gran momento, muy rápido. Dudas para salir jugando.
Sergio Rodríguez: Seguro en los anticipos. Correcto. Sale jugando.
Mauro Maidana: Alternativa válida en ofensiva. Capacidad para centrar.
Mediocampistas:
NOB
Pablo Pérez: Agresivo, despliegue para la marca y técnica en el pase. Gol.
Lucas Bernardi: Estratega, gestor del primer pase. Panorama y visión de juego.
Víctor Figueroa: Gran dinámica, cambio de ritmo de mitad hacia arriba. Talento.
CSIR
Gastón Gonzalez: Sacrificio, recorrido y una gran pegada.
Franco Dolci: Experiencia, orden,. voz de mando. Lanzador.
Diego Cardozo: Poco apego a la marca. Rompe líneas, gran pegada. Es el goleador del equipo.
Delanteros:
NOB
Fabián Muñoz: Picante, desequilibrante por afuera. Atrevido, encarador.
David Trezeguet: Salía del área, sacaba su marca para generar espacios. Pivote.
Maximiliano Rodríguez: Experiencia, inteligencia, técnica. Capacidad para ponerse el equipo al hombro.
CSIR
Facundo Curuchet: Se pone pie a pie y gana. Facilidad para entrar en velocidad
Cristian Tarragona: Se mueve, aguanta de espaldas, efectivo de frente al arco.
Hernán Encina: Inquieto, trayectoria y habilidad para filtrar un pase.
