Un largo y detallado informe realizado por el equipo del intendente electo de Luján, Omar de Marchi, revela la crítica situación financiera del departamento.
Al igual que en Guaymallén, en ese municipio la transición no está resultando para nada fácil. Al punto que el jefe comunal actual, Carlos López Puelles, y quien lo sucederá en diciembre nunca han cruzado palabra para abordar el estado de la comuna de cara al traspaso del mando en diciembre.
El informe elaborado por la gente del demócrata-macrista asegura que el panorama es tan complicado que la deuda supera los $ 400 millones y el departamento está en una virtual cesación de pagos.
“La crisis económica y financiera es muy compleja y su magnitud no es conocida ni siquiera por las actuales autoridades. Sólo para empezar en diciembre necesitaremos cerca de $ 150 millones para cubrir obligaciones exigibles.
En 2014, se habría producido un déficit de $ 66 millones entre los gastos efectuados y los recursos obtenidos. Este año se vislumbra uno peor; sólo en el primer semestre el déficit alcanza los $ 56 millones. Proyectamos 60 millones más para el segundo, totalizando un saldo negativo para 2015 cercano a los $ 120 millones”, explicó Antonio Spezia, el contador que es referente del equipo económico de De Marchi.
En la misma comunicación, se detalla que a los mencionados números hay que sumar que la gestión del justicialista “ha emitido de manera irregular cheques de pago diferido con diversos vencimientos hasta el 31 de diciembre de 2015 por un importe cercano a los 50 millones.
Además, aún no han pagado la totalidad de los sueldos de julio, por lo que presumimos que no existen los fondos para pagar los cheques emitidos.
Un dato muy alarmante y descriptivo es que en esta semana que acaba de concluir, han sido rechazados cheques por falta de fondos en cuenta corriente por un valor superior a $ 3 millones”.
Este diario intentó consultar al actual gobierno de Luján pero sólo se acotó, desde el área de prensa, que “no hay intenciones de hablar”. Con lo cual, lamentablemente sólo hay una voz del escenario de la llamada “tierra del malbec”.
“La situación es muy compleja. Nuestra preocupación es obviamente el comienzo. Tenemos una necesidad inmediata de $ 50 millones porque vamos a estar muy complicados en el pago de sueldos de noviembre (que es en diciembre). Además de la deuda total hay un montón de pasivos que van a ir surgiendo una vez que lleguemos. De obras, por ejemplo, que se han hecho hace tres años y no se han pagado”, señaló De Marchi.
Igualmente, el futuro intendente enfatizó que los vecinos deben estar tranquilos porque ellos solucionarán las cuentas en un corto plazo. “Quiero dar un mensaje de optimismo. Estoy convencido que vamos a salir adelante, que vamos a blanquearles a los vecinos la verdadera situación municipal, que todos conozcan el estado real de números y juntos empezar a ordenarlos. Hoy hay gastos que se producen producto del descontrol manifiesto existente. Cuando nosotros lo ordenemos, iremos saliendo adelante rápido. Los primeros 6 meses van a servir para ordenar el tema números: ingresos versus egresos”, remarcó quien representó al frente Cambia Mendoza en la elección de junio.
Lo que más preocupa
En el informe, que cuenta con un cuadro en el que se detallan las deudas, aseguran que lo más preocupante es la "falta de responsabilidad" de López Puelles.
“Han engañado a una institución bancaria que actúa como agente financiero municipal al tomar un crédito por $ 14.450.000 de pesos garantizándolo con un contrato de adelanto de tasas municipales con YPF que es inexistente, porque no cuenta con las autorizaciones necesarias del Concejo Deliberante. Esto transforma a la operación en nula. El banco adelantó los fondos de manera irregular con vencimiento al 31 de diciembre, pago que no reconocemos y deberán responder personalmente los firmantes”, remarca el informe.
A su vez, dicen que hay juicios contra el municipio laborales, de proveedores y de diversas materias, que superan los $ 25 millones.
“Estamos trabajando junto a un grupo de abogados para efectuar las presentaciones que correspondan al Tribunal de Cuentas, a la Justicia y a través del propio Concejo Deliberante. Aún no están aprobados por el Tribunal de Cuentas los ejercicios 2011, 2012, 2013 y 2014, lo que nos genera una enorme preocupación. Queremos auditar el efectivo cumplimiento de los contratos de obras en ejecución y terminados. Es evidente la pésima calidad de las obras de asfalto concluidas recientemente y queremos saber cómo, cuánto y a quién se les ha pagado”, denunció el concejal Sebastián Bragagnolo.
Los ejercicios mencionados por Bragagnolo como no aprobados por el Tribunal de Cuentas abarcan toda la gestión de López Puelles y el último año de Omar Parisi.
Transiciones diferentes
Como De Marchi ya fue intendente de Luján, tiene una transición en su haber. Asegura que con Luis Carral (PJ) la cuestión fue muy diferente porque con López Puelles directamente no hay vínculo.
“Con Carral podíamos hablar. Si bien es cierto que fue más corta, 40 días versus seis meses, esto debería hacerla mejor ahora. Pero lamentablemente no hay diálogo. Sólo reuniones muy superficiales con algunos integrantes de nuestro equipo. La información la obtenemos por vías alternativas. Con Carral nos juntamos a la semana siguiente en la intendencia y él puso a disposición nuestra sus funcionarios. Eso que también venían de una situación complicada”, remarcó De Marchi.