De a dos tal vez sea mejor - Por José Luis Toso

Muchos radicales piensan que Abed será un gran aporte en el debate inevitable por la crisis de la economía.

De a dos tal vez sea mejor - Por José Luis Toso
De a dos tal vez sea mejor - Por José Luis Toso

Suárez-Abed no es exactamente una fórmula de Cornejo. Sí es la fórmula del cornejismo, o del Gobierno, para competir en el proceso electoral provincial de este año con el propósito de que Cambia Mendoza (¿o el radicalismo?) gobierne cuatro años más desde diciembre.

Lo que sí logra Cornejo claramente con la confirmación de Mario Abed como candidato a vicegobernador es cerrar cuanto antes el juego interno por las candidaturas, por lo menos las más importantes, en un año electoral que se presenta siempre favorable para el oficialismo local pero no del todo fácil.

El cotejo de encuestas alerta al poder de turno: nada garantiza una elección cómoda. Por eso el primer objetivo claro del jefe del Ejecutivo era llegar a la Fiesta de la Vendimia con el calendario de votaciones resuelto y el nombre del postulante a la sucesión definido. Lo logró con buena antelación. Quedaba pendiente la elección del número dos en un escenario de negociaciones inevitables.

Abed estaba anotado en la carrera por un lugar en la fórmula desde hace varios meses. Se especuló mucho con su nombre como principal aspirante, pero siempre el grupo de postulantes del Gobernador tenía prioridad. Sin embargo, en algún momento se supo, porque así trascendió, que ser candidato a vice era para el juninense como colmar sus aspiraciones para este tiempo de su trayectoria política.

Suárez, que estaba incluido entre los preferidos del Gobernador, pero no era el mayor “delfín” (era Kerchner) terminó imponiéndose con el visto bueno de Cornejo como prenda de unión en ese momento entre él y Julio Cobos, que siempre apostó más por el jefe comunal de la Capital que por el superministro del gabinete local.

La voz del jefe radical de Junín, en su cuarto mandato consecutivo, fue siempre muy escuchada en el cuarto piso de la Casa de Gobierno. Su cercanía e identificación con Cobos no impedía en los últimos meses que el diálogo con el Gobernador fuese fluido.

Y así se llegó a la fórmula de intendentes con galardones como para salir a pelear la defensa del poder.  Suárez y Abed, cada uno con sus virtudes y defectos, puede llegar a distintos sectores del electorado.

El jefe de la Capital heredó la “niña bonita” de la provincia pero puede anotar en su haber haber perfeccionado el manejo de una ciudad “amable” que siempre es bien vista por quienes llegan a Mendoza.

Por su parte, el ya caudillo de la zona Este por la UCR tiene el carisma que tal vez requiera la fórmula y una cercanía con la gente que prácticamente todos en el ambiente partidario le reconocen, en especial en los departamentos de su influencia. Pero también influyó en el consentimiento de Cornejo para que Abed integrara la fórmula algo que el juninense venía aconsejando cuando aún no se definía la candidatura principal.

Abed siempre opinó que la realidad nacional va a imponer un escenario de debate muy áspero para el oficialismo, donde los asuntos más débiles de la política económica del macrismo van a ser inevitables. Inflación, tarifas de servicios, recesión, problemas del agro y de la producción en general van a requerir “letra” y predisposición para la discusión fuerte.

Con ese panorama, indudablemente Cornejo debía priorizar lo práctico y para ello debió dejar de lado pretensiones y algunos lujos que en otro momento podría haber elegido, como destinar el número dos a una dirigente partidaria para cumplir con el cupo femenino, que sí se impone para el ámbito legislativo pero no es exigencia para el Ejecutivo.

No caben dudas de que el Gobernador en algún momento se pondrá al frente de la campaña a favor de la fórmula encabezada por el intendente Suárez. Si bien los vaivenes económicos derivados de las políticas nacionales le generan dolores de cabeza también aquí (otra vez la inflación mensual mendocina superó la media nacional), el esfuerzo de la gestión de Cornejo por poner en orden las desmadradas cuentas públicas heredadas, por citar uno de los logros claros de esta gestión, será un bien preciado que el oficialismo pondrá sobre la mesa de ofertas electorales.

Recién en estos días hubo una admisión oficial de la preocupación que genera la crisis de la economía, cuando la ministra de Hacienda admitió que la baja de la recaudación tributaria, de la mano del parate recesivo, obligará al Ejecutivo a hacer malabares para que las obligaciones y pagos en general se puedan cumplir.

El tema salarial es un aspecto no menor, si se tiene en cuenta que antes de asumir Cornejo debió afrontar la falta de recursos de la administración de Pérez para cumplir con salarios y aguinaldos estatales. Terminar sus cuatro años al frente de la administración sin algún tipo de incumplimiento en tal sentido es muy importante para el Gobernador.

Finalmente, las energías del oficialismo parecen estar puestas a pleno en la campaña por venir. Salvo escaramuzas lógicas de la pasión que infunde el año en curso, como la que se produjo en el Senado por la votación del Defensor de las Personas con Discapacidad, es probable que los aspectos de gestión sean tratados con más cuidado desde el Gobierno para evitar imprevistos.

Por ejemplo, Cornejo fue bastante complaciente con la Justicia en estos días cuando afirmó públicamente que no apelará la decisión que tome la Corte sobre el reclamo de los intendentes del PJ más allá de que el fallo sea en contra de su decisión. Aunque sí exigió celeridad de parte de los jueces supremos, lo suyo mostró una actitud republicana muy elogiable que en otras circunstancias posiblemente no se manifestaran en virtud de su ímpetu innato.

Encabezar una campaña en la que mucho incidirá la adversa realidad económica nacional y a la vez comenzar el trasvase de poder si Suárez resulta electo gobernador, dos aspectos salientes que deberá encarar Cornejo en sus últimos 9 meses de mandato.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA