Una cosa de brujas. Una maldición. Parece una historia de magia negra.
En el mejor momento futbolístico del Tomba (líder del torneo) y cuando venía pidiendo cancha a gritos - el DT lo veía muy bien en las prácticas-, el Mago Ramírez tendrá que dejar la varita a un costado y ver al equipo desde la tribuna.
Y es que una cirugía en la rodilla izquierda (meniscos) lo dejará inactivo por ¿veinte días? Es el tiempo estipulado del cuerpo médico para el retorno del enganche a las canchas.
El diez ya tenía molestias pero no le impedía jugar, aunque estaba claro que si le impedía estar al ciento por ciento iba a ser operado. En la práctica del miércoles sufrió más de la cuenta y por eso pasó por el quirófano.
Más allá de ser suplente y desempeñarse casi siempre algunos minutos en los segundos tiempos, David es un futbolista muy importante para el adiestrador. Es considerado una pieza clave dentro y fuera de la cancha por su experiencia y ascendencia en el plantel. “Nunca es bueno tener bajas”, clamó el Gallego sobre su ausencia.
En este tramo clave, el Expreso va por todo pero sin el toque de magia.
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“David venía con una molestia desde hace unas semanas, sabíamos de la lesión y habíamos decidido operar si aparecía algún tipo de inconveniente. Aprovechamos que la rodilla está bien. No tenía limitaciones en cuanto a sus movimientos y al momento de jugar, pero todos teníamos conciencia que la bomba podía estallar en cualquier momento. Se hizo la cirugía sobre un tercio del menisco interno. Llevamos a cabo la operación y el Mago y se fue a casa sin problemas. Por lo previsto, el lunes tiene que estar trotando y en dos semanas esperamos que pueda estar a disposición del entrenador. Se dio una situación similar con Leo Sigali cuando el Oso estaba en el club” (Fuente @LTA2016- Radio Jornada 91.9).
