Un vendedor de autos y su familia fueron asaltados el martes por la noche en su casa de Maipú. Los ladrones los golpearon, amenazaron con abusar de una joven de 19 años y finalmente escaparon con un jugoso botín. Sospechan de una banda que en los últimos días cometió varios atracos en el Gran Mendoza.
Minutos después de las 20 del martes, dos hombres golpearon la puerta de la casa de la familia Fernández, ubicada sobre la Lateral norte del Acceso Este en el barrio Norte de Maipú.
Allí funciona una pequeña concesionaria, propiedad de Jorge (56).
Justamente él fue quien salió a atender el llamado de los desconocidos quienes, en un breve diálogo, le indicaron que estaban interesados en una camioneta de color rojo que tenía a la venta.
Como Jorge pensó que estaba frente a una posible transacción, pidió a sus (falsos) clientes que lo esperaran en la calle mientras iba a buscar las llaves para abrir el negocio.
Esa maniobra fue aprovechada por los sujetos que empujaron la puerta, redujeron a Jorge y coparon la casa.
Adentro estaban la esposa y los dos hijos del vendedor, que también fueron reducidos.
Para entonces, a los dos falsos clientes se habían sumado otros tres cómplices. Los cinco llevaban armas de fuego y dos de ellos tenían capuchas.
A buscar la plata
Para el vendedor -otrora chacarero- el atraco duró entre cinco y siete minutos, "aunque mi esposa dice que el tiempo le pareció interminable", se sinceró.
"Sujetaron a mi hija del cuello y le apuntaron con un revólver en la cabeza mientras amenazaban con matarla o violarla", indicó Jorge.
Mientras algunos revolvían la casa y exigían a gritos dinero, dos se dedicaron a golpear al comerciante. "Me pedían que me tirara al piso pero yo no lo hice. Entre los dos me patearon y golpearon", relató mientras se tocaba las excoriaciones que le quedaron en la frente y el cuero cabelludo.
El asalto se había tornado tan violento que finalmente la joven de 19 años se dirigió hasta el lugar donde su padre había guardado el dinero que esa mañana había cobrado tras vender una camioneta Ford F 100 y se los entregó. Adentró habían unos 115 mil pesos, confiaron las fuentes.
Con la plata en mano, algunos celulares y documentación, los atracadores corrieron a la puerta donde los esperaba un VW Voyage de color rojo.
Justo en ese momento pasaba por la puerta de la casa un camión que, por sus grandes dimensiones, bloqueó la salida del auto. "Entonces unos de los ladrones apuntó al chofer con un arma y lo obligó a despejarle la salida rápidamente", dijo Jorge.
La huida también fue presenciada por un hijo de la víctima que justo en ese momento volvía a su casa.
El vendedor confió que no sospecha directamente de nadie pero que cree que el dato pudo haberse filtrado de su círculo laboral. "Parte de mi trabajo se basa en averiguar si hay vehículos que están en venta. Entonces, los que saben que estoy interesado en comprar, saben que tengo dinero", según especuló.
El hecho fue denunciado en la Oficina Fiscal 11 donde quedó caratulado como robo agravado.
La banda del auto rojo
Si bien los investigadores prefirieron mantener reserva acerca de los atracos que habría perpetrado esta banda, indicaron que son sospechosos de, al menos, otros tres robos cometidos en el Gran Mendoza en los últimos días.
Es que víctimas y testigos de esos hechos indicaron que los asaltantes se movían en un VW Voyage de color rojo. Pero no sólo el vehículo los delató; quienes los han visto en acción han coincidido en las características físicas de algunos de los miembros de la banda.
Por ahora, se sabe que el auto en el que se conducen fue robado el 30 de julio en medio de una entradera en Guaymallén.
Desde entonces, al menos cometieron otros tres robos más, con armas.