Hace unos años, la periodista Helen Rowland puso en palabras uno de los pensamientos más frecuentes en la cabeza de los seres humanos: "Las locuras que más se lamentan en la vida de un hombre son las que no se cometieron cuando se tuvo la oportunidad".
Sin embargo, ¿qué es una locura? Para Daniel Aye, ésta es una acción que se encuentra en lo cotidiano. "Es todo aquello que vuelve loca a una persona de mi edad y que lo podés encontrar en el día a día". Eso es lo que muestra a través de su show: "Loco yo".
El unipersonal habla de las distintas realidades de la persona: la pareja, los hijos, los trámites, la espera. "Todo lo que vuelve loco a un tipo de 55 años como yo", dice Aye entre risas.
“Todo lo que digo es ficción. Es algo que hay que aclarar porque, si no, me vendrían a buscar". El actor también aclara que, al no tener cuestiones políticas, es un show digerible.
“A pesar de que mi ideología siempre está visible, el espectáculo no busca incomodar al público. Lo ideal es que la gente vaya y disfrute y, si puede reflexionar... mejor”.
"Toda la vida hice stand up, sólo que ahora se puso de moda la palabra". Hoy, uno de los históricos humoristas de la provincia se presenta en el escenario del Lobby Bar.
Allí, el Negro no contará con la compañía de su clásico compañero: "Esta vez, Jorge Sosa no me acompaña. Voy a estar solo después de mucho tiempo, por eso la estructura cambia. Toco temas que quizás con él no haría y agrego tópicos de actualidad de la semana".
Pero el alma del show es el mismo de siempre: lo cotidiano. "Es parte del humor: deformar e ironizar esa cotidianidad. Ya está todo inventado, por eso hay que darle una vuelta de tuerca y así atraer al público y que se sienta identificado. En todos mis shows busco lograr esa identificación".
Cierre de Vararte
Fueron varias las veces que Aye se presentó con sus chistes en el espacio cultural que, a fin de mes, cierra sus puertas. “Todos los artistas estamos consternados. Es mucha la tristeza porque se nos va otro espacio... ¿y cuántos van?”
“Como artista, creo que todo lugar destinado para el arte debería tener cierto apoyo. Por ahí se malentiende con el tema de subsidios, pero mi propuesta implica la quita de impuestos, ayudar con la publicidad y más. Es algo que he peleado toda mi carrera. Algo que no pasa y no lo digo por este Gobierno ni el anterior ni el otro. Es algo que se repite desde 1985 en que yo arranqué con esto”.
