Hay casos de familias que emprenden la aventura del Rally Dakar. Esta historia trató sobre los Nisiglia, conformada por un padre y sus dos hijos. Bolivia tenía gran expectativa en ellos: Walter, en cuatriciclos, y sus dos hijos en motos.
El más experimentado marchaba en el 9° puesto, pero en la tercera etapa, entre San Juan de Marcona y Arequipa, su hijo mayor Walter Jr, se cayó y se fracturó un brazo, lo cual tuvo como consecuencia el abandono de la prueba.
Su padre no lo dudo, y a pesar de encontrarse en una posición que prometía mucho, decidió renunciar para acompañar a su hijo al hospital, donde recibió la atención necesaria para este tipo de accidentes. Su segundo hijo Daniel, también tuvo la iniciativa de querer abandonar, pero Walter lo convenció y le dió tranquilidad para que siguiera en la competencia.
“Me duele más el corazón", dijo Wálter Nosiglia padre al llegar al campamento de San Juan luego de confirmar su abandono.
Walter Nosiglia Jr también se había fracturado el año pasado en el Dakar, esa vez en la muñeca y en la cuarta etapa. Ahora marchaba en la 18ª posición.
El equipo boliviano, tras el abandono de los dos Nosiglia, queda ahora representado por
Daniel Nosiglia, Fabricio Fuentes y Danny Nogales en motos; Leonardo Martínez en cuadriciclos y Luis Barbery en coches.
