Las victorias de Kevin Benavídez en motos, Ignacio Casale en quads, Giniel de Villiers en coches y Ton Van Genugten en camiones en la última especial no han provocado cambios en lo alto de la jerarquía del rally.
Matthias Walkner se ha convertido en el primer ganador austríaco en motos, permitiendo a la marca de la misma nacional proseguir con su dominio en la prueba al sumar un 17º Dakar consecutivo.
Peugeot se despide en su última participación con la corona puesta, aunque en esta ocasión tan solo uno de sus coches se haya subido al podio, el 3008 Maxi de Carlos Sainz.
Eduard Nikolaev, amenazado hasta la víspera de la meta final por Federico Villagra, logra finalmente un tercer título con su camión Kamaz.
Por su parte, el chileno Ignacio Casale se impone en su segundo Dakar después de dominar de principio a fin la clasificación general.
Lo esencial
La carrera de motos, más reñida que nunca, no tardó en ofrecernos su primer cambio de tornas con el abandono prematuro de Sam Sunderland en las dunas de San Juan de Marcona el 4º día del rally.
El vigente campeón, ganador de 2 de las 3 primeras etapas, dejaba vía libre a una manada especialmente hambrienta… liderada por Adrien van Beveren y Kevin Benavides.
Los dos pilotos harían peligrar el habitual dominio de KTM, relevándose en el primer puesto en varias ocasiones, pugna en la que no faltaron los brillantes recitales de Joan Barreda o Antoine Meo, antes de una décima etapa, intensa y devastadora.
Esa jornada que tendría que haber permitido al joven argentino triunfar en su tierra podría fin a sus esperanzas, debido a un terrible error de navegación en los ríos de Belén, al final de la especial.
Otros favoritos cayeron en la trampa, entre ellos Toby Price, mientras que Matthias Walkner y Van Beveren lograban salir airosos.
Posteriormente, una dura caída del piloto de Yamaha a 3 kilómetros de la meta dejaba al austríaco solo a la cabeza del Dakar.
Gracias a una gestión perfecta de la prueba al final, Walkner se adjudica a sus 31 años el más bello galardón de su carrera y permite a KTM fardar de una increíble serie de 17 victorias seguidas.
El día después de su primera victoria de etapa, la 10ª de su carrera en el Dakar, Sébastien Loeb se veía forzado a dejar la carrera, vencido por las dunas del desierto de Tanaka.
No fue ni la primera ni la última sorpresa de este Dakar, imprevisible e indomable: Nani Roma dejaría la prueba tras dar varias vueltas de campana en la etapa en bucle en Pisco, mientras que Stéphane Peterhansel perdía los mandos del rally al sufrir un accidente en la etapa maratón de Uyuni.
Incluso Nasser Al Attiyah, gran domador de dunas, sufriría en la arena de San Juan de Marcona: ¡perdiendo una hora después de 4 días de carrera! Y en medio de esta hecatombe, Carlos Sainz iba avanzando sin cometer ni un solo error, algo a lo que ya no nos tenía acostumbrados.
"El Matador" supo atacar con cabeza, acaparar la posición de líder y gestionarla con sabiduría al volante de su 3008 Maxi. En Córdoba, se sube a lo más alto de un podio que curiosamente se parece a aquel de 2010, cuando el piloto madrileño lograba imponerse frente a Al Attiyah, segundo (¡entonces a tan solo 2 minutos!). Giniel de Villiers termina en el trío a la cabeza por octava vez en 15 participaciones, mientras que Peterhansel se queda fuera del podio tras un último pinchazo la víspera de la meta.
Con tres victorias consecutivas en las tres primeras etapas, Ignacio Casale hizo cundir el pánico entre sus rivales. Por su parte, Sergey Karyakin, vigente campeón, dejaba el Dakar tras sufrir una lesión en el rally, al igual que Rafal Sonik, ganador de 2015.
A continuación, el piloto chileno supo dominar bien la carrera. Al mismo tiempo permitió a dos jóvenes argentinos, que representan el futuro de la disciplina de quads, mostrar su talento: se trata de Nicolás Cavigliasso, 26 años, y Jeremías González Ferioli, 22 años, que completan el podio final de la categoría en ese orden.
Eduard Nikolaev ofrecía un comienzo vertiginoso en su octavo Dakar. Imperial en las dunas peruanas, el campeón de 2017 no tardó en distanciarse de todos sus rivales… con una gran excepción: el tenaz Federico Villagra.
El argentino, único piloto que realmente ha podido plantar cara al líder del clan Kamaz, avanzó modestamente en la primera semana antes de ponerse a ejercer presión sobre el ruso y hacerse con la cabeza de la general.
Sin embargo, una caja de cambios recalcitrante echó al final por tierra con las aspiraciones del piloto de Iveco, que abandona la prueba la víspera de la meta final, dejando la vía libre para que Nikolaev triunfe por tercera vez en el Dakar. El segundo de la categoría, Siarhei Viazovich se encuentra a casi 4 horas…
En el segundo año de SxS, Reinaldo Varela ha hecho gala de una gran regularidad en los primeros puestos, a lo que hay que añadir 5 victorias de etapa, que le permiten subir a lo más alto del podio. El brasileño ha tenido que pelear, entre otros, con un feroz Patrice Garrouste, que también ha sumado 5 victorias.
Para Halpern, "es un sueño cumplido"
Sebastián Halpern encaró un nuevo Dakar al mando de una Toyota Hilux del South Racing y se clasificó en el 9º puesto de la general. “Cuando cruzamos la llegada, nos pareció increíble”, comentó Sebastián en Campeones.
El mendocino compitió en el Dakar de muchas maneras: como piloto de quad (en el 2011 terminó 2º), como navegante de Ricardo Martínez, otra vez como corredor de quad y nuevamente como conductor de auto.
En esta 40ª edición, el piloto de 38 años afrontó la competencia al mando de una Toyota Hilux del equipo South Racing y con Eduardo Pulenta como navegante, y finalizaron con una destacada 9ª posición en la clasificación general de Autos, por encima de varios equipos oficiales y pilotos profesionales.
“Es un sueño cumplido. Antes de largar el Dakar era un sueño pero de esos lejanos, casi imposibles. Encima en el primer día quedamos 43º. Y bueno, fuimos día a día, y pudimos cumplir. Cuando cruzamos la llegada, nos pareció increíble”, comentó.
Cuando el equipo Campeones lo consultó el porqué de este gran resultado, Halpern indicó: “Se dio porque hicimos un gran trabajo dentro de la camioneta y porque tenemos un gran grupo de trabajo detrás. Los últimos días lo tuvimos a Lucio muy fuerte, nosotros también empujamos más y el desgaste de la camioneta era aún más, entonces el laburo de los mecánicos tenía que ser más fuerte”.