Después de una década viviendo en Italia, Wanda Nara se mudó definitivamente a París, Francia. Es que pese a que su esposo, Mauro Icardi, ya llevaba seis meses jugando en el París Saint-Germain, ella y sus hijos seguían viviendo en su casa de Milán. Pero la firma del millonario contrato del delantero y el club los obligó al traslado.
La modelo reflejó el viaje en su redes sociales. “Volando a casa, Francia, París, New Life (Nueva vida)”, escribió en su cuenta de Instagram junto a una imagen en la que se la veía en el aeropuerto, a punto de abordar su vuelo privado, junto al jugador, su suegro y sus hijos Valentino, Benedicto, Constantino, Francesca e Isabella.
El “lindo desafío”, como lo calificó su hermana Zaira, continuó con la instalación de sus cosas en una lujosa casa con un amplio jardín en la capital francesa. “Los cambios son para valientes, vamos por esos sueños que tenés, que son los míos también, yo trabajaré siempre para cumplirlos @mauroicardi”, añadió en otra publicación acerca de esta nueva etapa.
Pero no todo fue color de rosa. Como todo gran cambio, la mudanza estuvo acompañada de complicaciones y así lo reflejó la mediática en sus stories. Entre tanta caja, valija y paquetes que llevaron, a Wan le resultó difícil encontrar algunas cosas.
“Por los próximos días mi look va a ser medio extraño porque estamos ordenando valijas y no encuentro nada”, contó entre risas, mientras mostraba su particular atuendo, usando lo primero que encontraba. Sus hijos también sufrieron las consecuencias del desorden y se veían “disfrazados” vistiendo cualquier prenda.
Además de la mudanza, por estos días la mayor de las hermanas Nara está abocada a la realización de la serie que se inspirará en su vida. Según contó en una charla con la revista Caras, Netflix y HBO le propusieron contar su historia, aportando datos inéditos de su vida.