En la noche del domingo 5 de julio, parecía que lo peor para Samanta Casais ya había pasado, sin embargo, parece haber sido el inicio de una pesadilla que aún no termina. Luego de haber sido descalificada de “Bake Off Argentina, el gran pastelero” por haber omitido información sobre su experiencia laboral al momento de la inscripción, en la mañana de este jueves se supo que podría ir presa por una estafa y la causa de homicidio culposo que nunca se habría resuelto.
Según dio a conocer Diego Estévez en “Informamos de todo”, programa que se ve por la pantalla de América, las causas podrían unificarse porque “hay documentos y testimonios que avalan que Samanta estafó, no cumplió la pena por homicidio y podría ir a la cárcel”.
Amos hechos sucedieron a finales de 2017. Según la versión de Abel Cancela, concuñado de Casais, ella y su novio le vendieron un fondo de comercio que ya pertenecía a otra persona, a pocos días del accidente. Aparentemente, esta maniobra habría sido realizado para declarar la insolvencia económica y no hacerse cargo de la pena de $20.000 que se le había impuesto por el homicidio culposo de Alfredo Olguín en noviembre de 2017.
“Había un fondo de comercio perteneciente a Samanta Casais, el cual luego del accidente de Alfredo Olguín, a los 28 días, ella se desprende del bien. No solo se desprende de esto sino que también arregla el auto del accidente y lo vuelve a vender, sin avisar que el vehículo estaba involucrado en un siniestro. Se empieza a desprender de los bienes. Es un engaño moral”, explicó Leo Charlon, abogado de Cancela y Lorena Olguín, hija de la víctima del accidente.
Cancela contó que él y su pareja querían poner un local de comida, entonces Samanta y Juan Cruz Recchimuzzi, su cuñado, le ofrecen el que tenían ellos ubicado en Piedras 828 de Capital Federal. “Como era para la hermana y para mi, nos daban facilidad de pago para que no me metiera en deudas ni nada de eso. Acordamos un pago en efectivo y cheques”.
“A consecuencia de todo esto yo termino cerrando el local, porque aparece un verdadero dueño que es a quien se lo habían vendido antes”, agregó el hombre. Y dio algunos detalles del engaño que de su cuñado y su novia, cuando él tenía total confianza en ellos.
“Yo estoy adentro del local, cuando ya casi lo había pagado en su totalidad, me llama una persona diciendo que era el verdadero dueño del local. Me dijo que en 48 horas iba a estar ahí con un oficial de Justicia para el desalojo. Ahí le explico que yo se lo compré a Juan Cruz y él me envió un documento que demostraba que se lo habían vendido antes y que era el verdadero dueño”, relató.
Ante esta situación el hombre se comunicó con Recchimuzzi, pero nunca tuvo respuestas: “Él en ningún momento reconoció el engaño. Incluso dijo que a él lo habían estafado”.
El abogado explicó que “no importa qué era lo que ella quería hacer con el dinero de la estafa, sino por qué ella quería vender. Ella quería deshacerse del bien porque era pasible de tener que hacer una resarción económica que tenía que ver con el homicidio culposo”.
Ante la unificación de la vinculación de las dos Causas y de comprobarse la estafa, la pastelera podría enfrentar una pena de prisión, ya que según detalló el letrado ella nunca cumplió con el curso de manejo de tres meses y las cuatro cuotas de $5.000 pesos que se le impusieron por el homicidio culposo de O