A Shannen Doherty le diagnosticaron un cáncer en 2016, y fue allí cuando descubrió que su representante no había pagado en tiempo y forma el seguro médico por lo que además de batallar contra el mal, debió encarar un largo proceso judicial en su contra. En ese momento, las terapias surtieron efecto y tiempo después, pudo anunciar que el cáncer había remitido.
Sin embargo, el año pasado los médicos le dieron la peor noticia: no sólo había vuelto la enfermedad sino que además, había hecho metástasis por el resto del cuerpo, incluida la columna, lo que la ubicaba en la fase 4, la de mayor gravedad.
En una entrevista, la actriz confesó: “Tengo mucha vida en mí y no estoy lista para morir. Estoy considerando la posibilidad de grabar videos y escribir cartas... Hay cosas que necesito decirle a mi madre” y agregó: “Quiero que mi marido sepa lo que significa para mí... pero cada vez que llega el momento, siento que estoy cerrando algo y no puedo”.
Y resumió: “Es difícil terminar con mis asuntos cuando siento que voy a vivir otros 10 ó 15 años”.