Casi 46 años pasaron del estreno del primer episodio de “La familia Ingalls”, pero el programa sigue siendo un clásico de la televisión mundial. Estrenada el 11 de septiembre de 1974, la historia basada en la saga de libros de Laura Ingalls Wilder se convirtió en un hito para la ficción que hasta el día de hoy sigue emitiéndose, pero de la vida de la mayoría de los actores que le dieron vida a la historia, poco más se supo.
El primer reencuentro que tuvo el elenco fue en 1991, cuando Michael Landon, el padre de ese querido clan, falleció. Desde 1983, cuando terminaron las grabaciones, sólo se los volvió a ver a casi todos juntos en televisión en 2014, cuando en Today Show se juntaron los personajes de Laura Ingalls, Mary Ingalls, Carry Ingalls, Caroline Ingalls, Willy Oleson, Nellie Olson y Almanso Wilder.
Fue esa una de la últimas veces que se vio públicamente a Caroline, interpretada por Karen Trust Grassle, más allá de alguna esporádica participación en el cine. Es por eso que los fanáticos se sorprendieron cuando la actriz Alison Arngrim, Nellie Oleson en la ficción, anunció que Karen iba a leer historias a través de su canal de Youtube.
Esa recordada mamá tierna que vivía en medio del campo, luchaba por sus tres hijas (luego la familia se agrandó), era maestra, y capaz de los gestos más bondadosos y las enseñanzas más nobles, mostró que su esencia no cambió en todos estos años y a los 78 leyó “Teeny-Tiny”, una historia de su libro infantil favorito, “Historias que nunca envejecen”.
La realidad de Caroline no era tan distinta a la de Grassle. La mujer nació en Berkeley, California, el 25 de febrero de 1942. En 1974 la eligieron para el papel de su vida en “Little House on the Prairie” (el título original de la serie), y después de eso vino la fama mundial. Al finalizar la serie siguió ligada a la actuación, aunque sin la exposición que le había dado del show.
Actualmente vive en San Francisco y decidió avocarse al teatro. Cada tanto vuelve al set de filmación para ser parte de alguna película. Desde entonces prefiere evitar las entrevistas y se volvió muy selectiva a la hora de elegir un nuevo trabajo.