Este lunes 8 de noviembre el reality de pastelería de Telefé “Bake Off” llegó a su final y coronó como ganador a Carlos Martinic, el joven nacido en Tierra del Fuego.
El competencia con Facundo, el pastelero amateur sorprendió al jurado en cada una de sus presentaciones y se coronó como ganador.
Luego de la emoción y las vivencias compartidas con el jurado y los demás competidores, Carlos fue entrevistado por La Nación y contó parte de su vida y su infancia en en sur argentino.
“Estoy intentando caer en lo que ha pasado, es casi irreal. Es una sensación hermosa, pero pienso si es verdad o es un sueño, me cambió la vida”, comenzó diciendo Carlos Martinic.
El joven de 30 años agregó: “Jamás tomé clases de repostería, aprendí viendo programas de televisión, las competencias de cocina y pastelería son una gran escuela”, reconoció el docente del el colegio Don Bosco de Río Grande, como maestro auxiliar de 1° grado, maestro tutor en 4° año del secundario y da Didáctica de las Ciencias Naturales en el Nivel Superior, donde se forman los futuros maestros.
“Mi vocación siempre fue enseñar…Trabajaba tres turnos en una escuela y dejé todo para venir a Buenos Aires a hacer pastelería”, explicó el campeón.
Sobre su premio de $1.500.000, Carlos detalló lo que hará: “Es algo que vino de regalo y que no quiero malgastar. Estudiaré gastronomía y pastelería y voy a guardar algo para invertir en un emprendimiento”.
Martinic también relató durante la entrevista los duros momentos que vivió al decir: “Tuve muchísimos dolores en mi vida, el más grande fue la pérdida de mi mamá. Yo tenía 18 años y mi hermana menor había cumplido tres. Desgraciadamente, padeció una enfermedad muy dura y falleció. La recuerdo siempre con mucho cariño”, rememoró con la voz entrecortada y agregó: “Mamá tenía 43 años cuando murió y fue papá quien tuvo que asumir todos los roles”.
Para cerrar el pastelero amateur más famoso del país reconoció la labor de su padre y dijo: “Mi papá es todo un ejemplo de vida, es lo mejor que tengo. En su vida pasó de todo y siempre ha salido resiliente, esa fue una gran enseñanza que nos dejó. Se sacrificó mucho, buscó nuevos rumbos, está para darlo todo, es un tipazo”.