Sumándose a la lista, Jorge Rial anunció a través de sus redes sociales que viajará a Estados Unidos para poder recibir su dosis de vacuna contra el coronavirus. A pesar de que en un principio el conductor había dicho que no quería irse del país, las recientes declaraciones de Carlos Zanini y la insistencia de su familia terminaron por convencerlo.
“Efectivamente me voy a vacunar a Miami. La espera de un turno era larga y tediosa. Pero se bancaba. Incluso con el enojo de mi familia”, decía en el largo comunicado que hizo por Twitter. A causa de un cambio radical de postura, Rial se vio en el apuro de explicarse: “Sin embargo la actitud soberbia de (Carlos) Zannini me hizo tomar una decisión que venía evitando: no dejar en manos de los políticos mi salud”.
“Harto de ver cómo se vacunan personas no esenciales y amigos del poder, decidí escuchar las razones y pedidos de mi familia. Soy de riesgo y mi condición cardíaca haría difícil el tránsito de la enfermedad. Me cuidé como pidieron. Me anoté como pidieron. Esperé cómo me pidieron. Tuve la paciencia de millones de argentinos. Pero ver esa actitud miserable y los pedidos de mi familia terminaron de convencerme”, dijo con un tono que demostraba la paciencia perdida. Rial tiene 59 años y además sufre de condiciones cardíacas.
Pero a pesar de sentirse seguro con la decisión, el conductor de TV Nostra continuó con su testamento de rectificación: “Lo peor es que nosotros tomamos estas decisiones con vergüenza. Sentimos que es un privilegio. Ninguno de esos sentimientos los tienen los que tienen que dar el ejemplo. Ojalá las vacunas lleguen rápido y todos puedan evitar este virus maldito”.
Los dichos de Carlos Zanini
El procurador del Tesoro tuvo una situación privilegiada a la hora de esperar su vacuna. “No me arrepiento de haberlo hecho porque estaba en las condiciones legales para hacerlo”, dijo justificándose en televisión pública Carlos Zanini.
Fue entonces cuando Rial se volcó a las redes y escribió en su contra, diciendo que “leer lo que dijo Zannini nos espanta, escucharlo desde la soberbia nos violenta”. “Es funcionario de un Gobierno que levanta la bandera de la igualdad y priorizar a los humildes. Se vacunó como personal de salud y ahora se jacta de una superioridad esencial para él y su socio. No es por lo que peleamos. No hay justificativo. Solo desprecio”, decía hace unos días sus publicaciones por redes.