Aunque estuvieron diez años juntos y con tres hijas incluidas, parece que Nicole Neumann tuvo algunos límites con Fabián Cubero que nunca dejó traspasar. La modelo tiene una exigencia con todas sus parejas: una barrera inquebrantable con los temas de evacuación en el baño. Hasta lo considera una condición básica para mantener el erotismo en la pareja.
“¿Qué te la baja a vos?”, le preguntó Gabriel Oliveri en Santo Sábado, el programa que conduce junto al Pelado López. Muy sincera, ella confesó: “Los temas escatológicos. Hay baño de recepción, cuando el otro se metió a la ducha. Está el baño de las criaturas y que diga: ‘Me voy a ver qué hacen las chicas´. El otro se da cuenta cuando vos esquivas ese momento y dice: ‘Yo también lo tengo que esquivar’. No se habla, pero te das cuenta”.
“Para que el erotismo subsista, hay que cuidar esas cosas porque ya cuando perdés todo enfrente del otro… Y hay que cuidarlo en el tiempo”, continuó explicando para defender su postura. Fue entonces que Malena Guinzburg le cuestionó sobre su relación con Cubero y cómo había logrado mantener esa regla durante los años. “¿Estuviste diez años en pareja y nunca te cayó mal un sushi?”, le preguntó la panelista. “¡No! Diez años y no pasó. Y si pasó, nadie se enteró más que mi persona”, afirmó ella.
Hasta confesó que hubo una situación que se la bajó y no pudo seguir: “Me pasó con uno que me habló desde el baño y perdió, chicos. Nunca más hubo sexo ahí”.
La respuesta de Nicole Neumann
Pero sin dar tregua, a pesar de que los periodistas habían sido quienes le cuestionaron por su anterior relación, Mica Viciconte se refirió al tema en las redes, con una frase tipo indirecta. “Si no sueltas a tu ex, ¿con qué mano piensas agarrar al amor de tu vida?”, escribió en un Instagram Storie.
La panelista y la modelo han demostrado que no se llevan bien en más de una ocasión. Pero Viciconte seguro se refería a una reciente ocasión en la que a Nicole le cuestionaron sobre “un amor para toda la vida”. Tal vez, con su reciente noviazgo con el piloto Juan Manuel Urcera con quien ya hasta ha viajado al Sur, la impulsó a decir sin dudas: “¡Sí!”.