Este lunes todos los programas se refirieron al escandaloso final de “Bake Off” (Telefé) con la descalificación de Samanta Casais y el premio a Damián Pier.
Jorge Rial en “Intrusos” (América) realizó un pormenorizado análisis del certamen de pastelería y lo comparó con el reality “Gran Hermano” en donde el periodista fue el conductor en varias oportunidades.
En el comienzo del programa, el conductor dijo: “Tenemos que hablar de un error de producción. Hoy en día hay elementos más que suficientes para profundizar en el casting, no es como antes que te mandaban un video y tenías que confiar en lo que te decían porque no podías googlear tanto como ahora. Para mi ahí hubo cierto problema, sobre todo porque es un programa grabado con tanta anticipación”, empezó diciendo Rial.
“También hay que averiguar quién filtró todo esto. No solo spoilearon el programa sino que además hicieron acusaciones que llegaron a un grado de crueldad impresionante”, agregó.
Luego el padre de Morena Rial se refirió al papel de las redes sociales en la definición del programa: “Estamos hablando de que Twitter logró cambiarle el final a un programa internacional, algo que ya estaba cerrado y que no tenían intención de cambiarlo. Dudaron bastante, la presión se hizo insoportable y ahí lo cambiaron. Para mi, los realities tienen que ser en vivo, pero hay cosas que tienen que ser en vivo”.
“En un reality las reglas están, no se si para romperse pero si para reinterpretarse. Esto lo he contado quinientas veces: existe la manipulación en los medios de comunicación, lo vimos esta semana con la manipulación mediática y política con la muerte de Fabián Gutiérrez. Imaginate esa manipulación en un reality, obvio que se manipula. Nosotros manipulábamos en Gran Hermano alargando o acortando los tiempos de votación, pero esto pone en duda toda la estructura”, planteó el marido de Romina Pereiro.
Luego Rodrigo Lussich comentó que la definición de “Bake Off” la decidían los jueces y no el público a lo que Rial contestó: “Esto no es un reality, es un concurso de cocina. El Bailando no es un reality, es un concurso de baile. Un reality es otra cosa, como Gran Hermano u otros programas donde se ve la realidad de una persona, donde los ves 24 horas”.
Para finalizar el conductor dijo: “Twitter logró cambiarle el curso al programa que ya tenía un final atado con moño. Para la historia de la televisión lo que va a quedar es que Twitter cambió el final del programa”.