Diminutas y demasiado acentuadas. Al punto de que generan toda la sospecha de los usuarios. Mientras parte del mundo gira hacia las redes sociales “sin retoques” o con mensajes claros donde se manifiesten las ediciones, ellas siguen soñando con esa añorada cintura de avispa que se impuso hace muchos años y que no supera los 60 centímetros.
En el mundo es Cathie Jung quien ostenta la cintura más diminuta que llega nada menos que a 40 centímetros y que es, a las pruebas me remito, imposible y poco salubre
Así la cintura estrecha se convirtió en parte de la supuesta belleza femenina. Un detalle corporal muchas veces inalcanzable que varias famosas quieren ostentar en sus redes sociales. Wanda Nara es una de ellas. Dos de sus últimas publicaciones quedaron bajo la mira social justamente por este detalle.
Antes Romina Malaspina fue acusada de modificar su cintura para lucir una figura que dejó a todos con la duda. Las denuncias de Photoshop llovieron al igual que los elogios.
En la misma línea de acción se puede ubicar a Shakira. Con 44 años la cantante posó divina para la portada de Vogue. Vestido rojo pegado al cuerpo y una cintura, otra vez, demasiado marcada. Hay que decirlo, la mujer de Piqué siempre tuvo curvas sinuosas. ¿Photoshop o realidad?
Pero si de retoques digitales se trata hay que hablar sin dudarlo de las verdaderas reinas. Nada menos que las hermanas Kardashian. Kim se hizo tan experta que la realidad dista mucho de las fotos que ella publica en las redes sociales.
Demostrado entonces. La cintura de avispa... para las avispas.