El chef Coco Carreño acaba de despedir a su papá, César, quien batalló contra el COVID-19 durante casi 30 días. Con inmenso dolor, decidió hacer un móvil para LAM aunque se quebró al aire y no logró contener las lágrimas: “Fue durísimo y agradezco al médico que lo atendió porque hizo de todo pero no funcionó”.
“Estuvo un mes peleando. Él era médico, tenía 82 años y quería ir a trabajar igual porque decía que si no lo mataba el COVID, lo iba a matar el quedarse en casa. Y bueno... pasó”, confió con la angustia a flor de piel.
En forma de agradecimiento, reveló que el personal de salud “no da más, está agotado”. Y sobre su padre, compartió: “No podíamos verlo. Nos dejaron un par de veces... Mi viejo siempre dijo que el día que le tocara irse, no quería saber nada con estar en terapia intensiva porque era como perder su dignidad. Sin embargo, esos últimos días, después de ver que nada funcionaba, empezó a preguntar... tuvo ese impulso, ese volantazo de aferrarse a la vida”.
“La última vez que lo vi me pidió que me llevara sus cosas... había ido con mi hermano y no quise decir nada pero yo sabía que iba a morir. Sentí que era la despedida”, cerró.
Además, el cocinero se volcó a las redes sociales para homenajear a su papá: “Te voy a extrañar mucho, viejo, porque yo era el más chico y porque pasamos muchas cosas juntos. Es un poco inexplicable la sensación de orfandad y aún no creo haber caído en lo que viene, pero me queda la tranquilidad que dejás un buen legado: una mujer que te ama, 7 hijos incondicionales, 9 nietos que disfrutaban tus pastas con salsa de cada domingo y muchos profesionales que te recuerdan con afecto”.