Cinthia Fernández comparte su día a día en las redes sociales y así le muestra a sus seguidores todo lo nuevo que emprende. En la era de le tecnología, los desafíos virales son un clásico en las redes sociales y ella no se queda afuera.
En su cuenta de Instagram, la bailarina tiene 5.7 millones de seguidores que llenan sus posteos con comentarios en los que la apoyan por su preciada maternidad como también por su increíble cuerpo. Y justamente para todos ellos es para quienes postea cada fotografía.
Algunas semanas atrás, Fernández compartió un video en el que se mostraba inaugurando la temporada de pileta a pura cumbia. Se la vió bailando muy sensual una canción de La Joaqui y sus seguidores la llenaron de piropos.
En este caso, la mamá de las tres niñas se sumó a un desafío viral que consistía en apoyar la cabeza en el piso y sostener el cuerpo por encima realizando una postura similar a las propias de yoga.
Sin lugar a dudas, con su estado físico y valentía, Cinthia Fernández se sumó y lo realizó a la perfección en frente de la cámara. Lo que más sorprendió fue el osado outfit que eligió ya que ocultó únicamente sus partes íntimas con ropa interior muy cómoda de color nude.
En pocos minutos, el posteo superó los 62.000 likes y comentarios de apoyo como negativos: “Eso puede hacerse con una calza o un pantalón”, “Esta bueno que uses la cabeza para algo” y “Que belleza de mujer”.
La picante vuelta de Cinthia Fernández al contenido para adultos
Cinthia Fernández no deja de sorprender en las redes con sus posteos que van desde lo familiar junto a sus tres hijas, a las fotos y videos sin censura. La bailarina se sumó hace unos meses a una de las plataformas a través de las que muchas famosas venden erótico y, tras un tiempo desaparecida, volvió recargada.
“Y un día volví… y me mande una cagada. Para ver más hace click”, escribió Cinthia al pie de su posteo en el que no lleva ropa interior y apenas cubre sus partes con un cartel de presidiaria.
La ex angelita realizó una picante producción desde una supuesta cárcel. Para innovar, Cinthia Fernández hizo una sesión subida de tono desde un bar temático, ambientado como si fuera una prisión, y dejó todo a la imaginación de los usuarios.