Durante la cuarentena, todos estuvimos encerrados, inventando nuevas actividades y adquiriendo nuevos hábitos que, quizá por estar mucho tiempo fuera de casa, no podíamos adquirirlos o no conocíamos. Muchos nos volcamos a cocinar, a disfrutar de la cocina y del amor de nuestra familia.
Eso mismo le pasó a Chechu Bonelli, la periodista que confió que “cocinar, y poner y levantar la mesa pasó a ser una nueva actividad compartida”. A ella misma le pasó lo de comer platos distintos pero lo triste es que la criticaron cuando contó un gran logro respecto a su peso.
Sobre estos comentarios en su contra ella solo se limita a decir: “Yo siempre fui flaca, por naturaleza. De hecho, a mi mamá le decían Tero y yo heredé su cuerpo. Nunca tuve un problema de salud, siempre fue por algo genético. Lo que pasó ahora es que tuve la oportunidad de subir dos kilos, y lo disfruto y lo celebro porque sigo comiendo”.
Y ahora, la mujer del futbolista Darío Cvitanich y mamá de Lupe y Carmela está más bella que nunca. De su peso en la balanza se encarga ella y aquí la aplaudimos por su jugado cambio al pelo rubio y las poses tremendas que comparte con sus seguidores de Instagram.