Eran muchas las idas y venidas que Pamela David y sus hijos hacían de Buenos Aires a Mendoza y viceversa. Al parecer se cansó y aprovechó la pandemia para mudarse a nuestra provincia y así poder disfrutar de su vida familiar junto a Daniel Vila y los hermosos paisajes que le regalan las montañas.
Lo cierto es que no se mudó a cualquier casa de ciudad sino que se instaló en la impresionante mansión de su marido ubicada a los pies de la cordillera. Se llama Estancia San Lorenzo y tiene hasta un lago artificial propio.
La casa actual de Pamela tiene una gran pileta y un hermoso jardín que hace juego con las montañas que rodean su propiedad. Por dentro, la vivienda tiene cientos de detalles pensados para el relax, la comodidad y el confort.
En la decoración predomina la madera y las piedras y en cada espacio hay ventanales orientados al exterior para apreciar el cordón montañoso. Tiene un hogar de ladrillos y quebracho, el cual combina con las paredes de color tierra, además de barricas de vino local.
La propiedad tiene sistema acústico, tecnología Led y, como no podía ser de otro modo, es una casa inteligente.
Actualmente David está lejos de la pantalla chica y no ha revelado pistas de volver en el futuro inmediato; por el momento, ella disfruta de la paz y el relax mendocinos. Además de ser una mamá full time de sus dos hijos.