Su finalidad es mejorar las condiciones de acceso al financiamiento. La fortaleza de Cuyo Aval radica en que observa no sólo la historia de cada empresa, sino que tiene en cuenta el esquema integral del proyecto, considerando los factores decisivos de su realidad y su entorno, como así también las expectativas de crecimiento en el mediano y largo plazo.
El proceso mediante el cual se realiza la calificación inicia con un análisis preliminar de la Pyme. El solicitante presenta un proyecto u operación y Cuyo Aval evalúa la viabilidad y sustentabilidad del mismo. El asesoramiento se focaliza en el flujo de cada proyecto y se adapta a la necesidad de cada empresa.
Actualmente Cuyo Aval es la primera SGR de la región y la tercera del país que más Pymes asiste. Paulatinamente su servicio se extiende cada vez más en diferentes provincias, para dar asistencia a mayor cantidad de empresas en el país.
Hay numerosas empresas de la provincia que confían en la SGR mendocina. Esto ha favorecido el caudal de socios protectores que fortalecen el Fondo de Riesgo. En el año 2015 el Fondo de Riesgo escaló los 120 millones de pesos. En ese año se registraron 39 protectores. Hoy participan 67 socios protectores y el Fondo de Riesgo a la fecha asciende más de 300 millones de pesos.
Por otro lado, se ha logrado acceder a un mayor abanico de sectores, gracias a la mayor oferta de financiamiento que tienen hoy el país y la provincia. Podemos destacar que los rubros industriales que realizan más operaciones son la vitivinicultura, servicios y comercios, agroindustria, construcción, entre otros.
Cuyo Aval ha logrado un crecimiento interanual del 100% en monto de avales emitidos, llegando a 1000 millones en el año e impactando en más de 500 Pymes.
Sin dudas, las perspectivas de crecimiento son muy alentadoras para la SGR local en el próximo año. Se han planteado numerosas acciones para continuar fomentando el desarrollo de las Pymes y acompañarlos en el acceso al crédito mediante novedosas alternativas financieras.