El masaje ayurvédico es una práctica medicinal proveniente del Ayurveda, una medicina tradicional oriental que nació hace miles de años. Los aceites que más se utilizan en estos masajes son el aceite de sésamo, aceite de oliva, aceite de girasol y aceite de coco, algunos de estos pueden ser mezclados con sándalo o diversos aceites aromáticos que, además de mejorar el cutis, proporcionan olores agradables a la piel.
Los masajes ayurvédicos aumentan el sentido del tacto ofreciendo placer y relajación, colaboran con el proceso de purificación de la piel haciendo que las toxinas acumuladas cedan, hidratan, protegen, revitalizan y nutren el cutis. Usualmente se recomienda realizarlos temprano en la mañana antes de bañarse y lo mejor es dejar que actúe unos minutos en la piel antes de quitarlo.
Según el Ayurveda nos podemos alimentar también a través de la piel, es por esto que desde esta medicina recomiendan no poner nada en la piel que no estemos dispuestos a ingerir. Esto es lógico ya que lo que ponemos sobre nuestra piel ingresa al torrente sanguíneo a través de los poros transmitiendo sus propiedades.
