A casi un mes del inicio del llamado "megajuicio", ayer se terminaron de escuchar las acusaciones del Ministerio Público contra los cuatro ex magistrados federales, pero también en esta audiencia se dieron las primeras "escaramuzas" entre fiscales, querellantes y los acusados.
Es que el fiscal Dante Vega, después de la lectura de las acusaciones, pidió que se entregara copia escrita de las querellas a cada uno de los imputados y, de esa forma, evitar la lectura de cada causa que, por otra parte, ya fue escuchada en la sala.
Y si bien, en general, el planteamiento encontró el eco favorable en algunos de los imputados, el ex camarista Otilio Roque Romano optó por pedir que se siguiera con la lectura de cada una de las causas. Miret se remitió a lo que dijera su defensor (ausente en ese momento) e igual temperamento tomó -por teleconferencia- Carrizo.
La razón es que, como se dijo, "todos conocen en detalle" cada una de las causas (copia de las acusaciones están en poder de cada uno de los abogados defensores). Pero el momento sirvió para reclamar por la ausencia "repetida" de los defensores, como Ariel Civit, que representa al ex camarista Miret y a Bernardo Calderón (defensor de Romano), que "recién estaba por ahí, pero ahora no lo veo", dijo uno de los abogados que representa a las víctimas.
Sobre el final, la querella pidió que no se permitiera la palabra a los defensores Carlos Reig y Omar Venier porque "sus defendidos no estaban incluidos en estas causas". Sin embargo el Tribunal escuchó a cada uno de ellos. Reig solicitó hablar con su defendido (Antonio Indalecio Garro, un ex policía), mientras que Venier apoyó el reclamo fiscal con el fin de evitar, "por superflua", la lectura de la querella.
Las acusaciones
Vega, a la hora de resumir las imputaciones acumuladas contra los ex magistrados, señaló que Miret está acusado en 35 causas, entre las que se mencionan la no investigación de torturas, robos y violación de domicilio. Por su parte 19 son las causas contra Carrizo por desapariciones, privación ilegítima de la libertad, torturas y violación de domicilio.
En el caso de Guillermo Max Petra Recabarren las causas acumuladas en su contra son 22 hechos, mientras que a Romano se lo acusa en 97 causas y donde hay unas 30 personas que aún se encuentran desaparecidas. Ayer el Tribunal dispuso otro cuarto intermedio hasta el martes 25.
