"Contra lo imposible" y "Proyecto Géminis" son los dos tanques que vienen con buena potencia -y créditos de lujo- a instalarse en las multisalas locales. De Argentina, el estreno llega en clave de comedia con "El plan divino". En tanto, en Cine Universidad, se exhibirá la película que ganó el Oso de Oro en el último Festival de Berlín: "Sinónimos".
Proyecto Géminis. De Ang Lee, es una apuesta de ciencia ficción que lo tiene a Will Smith en un doble papel: es Henry Brogan, un asesino a sueldo que decide retirarse porque envejeció, pero esto no le va a resultar tan fácil, porque para lograrlo tendrá que enfrentarse a un clon suyo, mucho más joven.
Contra lo imposible. De James Mangold, está basada en la relación entre el ingeniero automovilístico y ex piloto Carroll Shelby y el piloto Ken Miles, durante el desarrollo del auto con el que Ford buscaba derrotar a Ferrari en las 24 Horas de Le Mans, para cumplir con el pedido de un despechado Henry Ford II. Lo que cuenta la película se considera una de las mayores victorias en la historia del automovilismo y creó una rivalidad sin equivalencias. Dos actorazos, Christian Bale y Matt Damon, se miden en esta esperada cinta que suena para carearse con "Guasón" ante Oscar. Sobre las posibilidades de que el filme consiga una estatuilla, Bale comentó: "Nos propusimos hacer la mejor película posible y creo que Jim (por Mangold, el director) ha hecho un filme increíble. Y ése es nuestro objetivo. Todo lo que pase después será fantástico y muy grato".
Sinónimos. Del israelí Nadav Lapid, cuenta la extraña estadía en París de Yoav que llega desde su Israel natal para empezar una nueva vida. Lleno de ilusiones, y creyendo que esa será su salvación, hace todo lo que está a su alcance para convertirse en francés. Pero las cosas no resultan como esperaba y tendrá que enfrentarse a tragicómicas dificultades, empezando por el idioma.
Aclamada joya que obtuvo dos premios en el Festival de Berlín, incluyendo el galardón máximo del Oso de Oro. Una lúcida reflexión sobre la importancia del idioma en la construcción de la identidad, así como también la mezcla de fascinación y desarraigo que atraviesa toda persona que se lanza a vivir en una cultura totalmente diferente a aquella en la que se crió. Sin erigirse en los postulados de filme de denuncia, este notable relato interpela a las democracias europeas y su rol en las políticas de asimilación de inmigrantes en grandes ciudades.
El plan divino. Después de muchos años sin aparecer en los créditos como director (su último filme fue "El mar de Lucas"), vuelve Víctor Laplace a ponerse detrás de la cámara para conducir los destinos de esta comedia protagonizada por él y Gastón Pauls y que tiene como contexto una pequeña iglesia aislada en la selva misionera.
Allí viven dos monaguillos cuarentones: Eustaquio y Heriberto. Ambos fueron abandonados siendo niños y crecieron como hermanos, bajo la tutela del Padre Roberto, un anciano sacerdote al que, en el final de su vida, deben cuidar. Eustaquio pretende quedar al mando de la Iglesia y Heriberto piensa sólo en María, una enigmática joven, que apenas repara en él.