Hace unos días cientos de mendocinos tuvieron la posibilidad de disfrutar las canciones de Paul McCartney, el legendario miembro de Los Beatles que regresó a nuestro país y actuó en Córdoba y Buenos Aires. Muchos de los espectadores aún no habían nacido cuando los cuatro de Liverpool se hicieron populares con el simple "Love me do". Pasaron más de 50 años de aquel fenómeno que luego se conoció como la Beatlemanía y que llegó incluso hasta nuestro terruño.
Los grillos cantaban en inglés
En junio de 1963 llegó a nuestro país el primer material de Los Beatles, un simple llamado "From me to you" y el doble The Beatles' Hits.Un mes después, la empresa discográfica Odeón decidió editar el simple para probar su repercusión; para ello, tradujeron (modalidad usada entonces) la palabra Beatles por el nombre de... ¡"Los Grillos"!
El simple contenía los temas "Para ti" (From me to you) y "Gracias nena" (Thank you girl) pero las ventas no fueron importantes. Luego se editaron las restantes canciones de "The Beatles' Hits" en un segundo sencillo. Así, "Amame" (Love me do) y "Por favor, yo" (Please, please me) fueron las últimas canciones bajo el nombre de "Los Grillos".
En aquel momento, traducir el nombre de artistas nuevos era algo frecuente. Por ejemplo a Little Richard se lo llamaba "Ricardito" o al grupo The Who se los traducía como Los Búhos.
Fue un alto ejecutivo del sello discográfico EMI Odeón en la Argentina, previendo el éxito del grupo en todo el mundo, quien inició la publicación de todos sus discos y cambió también el nombre con el que se lo conocía originalmente.
En febrero de 1964 salió a la venta una serie de discos de los ingleses en la Argentina, con una intensa campaña promocional.
Ingleses en tierras cuyanas
Los primeros discos de Los Beatles eran simples de 45 revoluciones y se reproducían en el legendario Wincofón.
Estos jóvenes músicos se identificaban con los chicos de aquel entonces. Pero muchos de los padres de cierta formación religiosa se alarmaban dramáticamente debido a las letras de "Love me do"... Pero estas polémicas, lejos de acallar la 'beatlemanía', la avivaba.
Con el correr de los meses,estos cuatro jóvenes británicos invadieron las disquerías de la ciudad.
Su música se escuchaba por todos lados y los noticieros de aquella época reflejaban su primera llegada a los Estados Unidos en 1964.
Ese mismo año, se estrenó en el cine Gran Rex, la película "Yeah, yeah, yeah", en la que actuaban John, Paul, George y Ringo, secundados por Norman Rossington, Wilfrid Brambell, Robin Ray, Marianne Stone.
El filme fue conocido como "Amanecer de un día agitado", dirigida por el estadounidense Richard Lester. A pesar de la muy buena crítica y la concurrencia de público, solamente se exhibió ese día.
Los “pibes” mendocinos comenzaron a escuchar sus canciones en la radio y corrieron a comprar sus éxitos. Y era tan sólo el comienzo de una larga explosión musical.