El delantero peruano Paolo Guerrero insinuó anoche que hubo responsabilidad del juez venezolano José Argote en la derrota por 2 a 1 sufrida por su seleccionado ante Chile por la semifinal de la Copa América de fútbol, para asegurar que "no quiero hablar más del arbitraje, pero hubo muchos imprevistos".
"No quiero hablar más del arbitraje, pero creo que está lo que sucedió en la FIFA", comentó Guerrero al referirse a los casos de corrupción denunciados por la justicia estadounidense contra la entidad madre del fútbol mundial, al tiempo que afirmó que "hubo muchos imprevistos".
Asimismo, el atacante peruano aseveró que "uno de los goles chilenos fue en posición adelantada" y que Argote "no sancionó" un supuesto penal cometido contra él cuando el partido expiraba.
El peruano no objetó, sin embargo, la expulsión a los 15 minutos del primer tiempo de su compañero Carlos Zambrano por juego brusco, pero la consideró "gravitante" para el desarrollo del partido. "Si hubiéramos estado 11 contra 11 otra habría sido la historia. Hicimos un gran partido", resumió Guerrero más allá de las sospechas contra el juez venezolano.
De entrada, ocurrió el incidente entre Zambrano y Arturo Vidal a poco de iniciado el juego, que Argote ni siquieró penó con amarilla a pesar del manotazo del chileno sobre el peruano.
Minutos después, el jugador incaico recibió amarilla y finalmente roja, correctamente, aunque ¿qué hubiera pasado si el árbitro utilizaba antes el mismo criterio?
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