La presidenta Cristina Fernández de Kirchner participará entre el jueves y viernes próximo de la Cumbre del G20 que se desarrollará en esta ciudad con la presencia del resto de los presidentes y primeros ministros de los 19 países miembros más la Unión Europea, además de los distintos organismos multilaterales internacionales.
Con el presidente ruso Vladimir Putin como anfitrión de la cita, las jefas y jefes de estado y primeros ministros deliberarán en el histórico Palacio Constantino de esta ciudad, la segunda en importancia de la Federación Rusa y que fue fundada en 1703 por Pedro El Grande.
Rusia ocupa este año la presidencia rotativa del G20 y, según adelantó el propio Putin, el tema principal del encuentro será la unión de fuerzas para acelerar el crecimiento económico mundial e impulsar el empleo.
En ese marco, hasta San Petersburgo llegarán las presidentas de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner y de Brasil, Dilma Rousseff, la canciller de Alemania Angela Merkel, el presidente de los Estados Unidos Barack Obama, el de China Xi Jinping, el de Francia Francois Hollande y la presidenta de Corea del Sur Park Geun-Hye.
También estarán presentes el presidente de México, Enrique Peña Nieto; de Sudáfrica, Jacob Zuma; de Indonesia, Susilo Bambang; y los primeros ministros de Italia, Enrico Letta; de la India, Manmonah Sing; de Australia, Kevin Rudd; del Reino Unido, David Cameron; de Japón, Shinzo Abe; de Turquía, Recep Tayyip Erdogan y de Canadá, Stephen Harper.
Además de la presencia el rey de Arabia Saudita, Abdala bin Abdelaziz, en esta cumbre del G20-2013 participarán representantes del Banco Mundial (Jim Yong Kim, presidente), del Fondo Monetario Internacional FMI (Christine Lagarde, presidenta), y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Organización Mundial de Comercio (OMC) y las Naciones Unidas (ONU), representada por su titular Ban Ki-moon, también asistirán a la cumbre en Rusia.
En tanto y como es habitual en cada una de estas cumbres, el país anfitrión puede invitar hasta cinco países no miembros y en este caso acudirán a la cita Brunei, que preside la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático; Etiopía, que ejerce la presidencia de la Unión Africana; Kazajistán, representando a la Comunidad de Estados Independientes; Senegal, líder de la Nueva Alianza para el Desarrollo de Africa y Singapur, que preside el Comité de Finanzas del FMI. Y también al foro 2013 ha sido invitado Chile.
La delegación que representará a la Argentina, encabezada por la Presidenta, estará integrada por el canciller Héctor Timerman, los ministros de Economía y de Trabajo, Hernán Lorenzino y Carlos Tomada, el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, y la embajadora argentina en Estados Unidos, Cecilia Nahón, quien en esta cumbre fue designada sherpa.
Mientras tanto, a cuatro días del inicio formal de la cumbre, la histórica San Petersburgo, ex Petrogrado y Leningrado, comienza a mostrar los primeros síntomas de las exigentes jornadas que demandará la cumbre.
El inflexible esquema de seguridad ruso se advierte en cada uno de los rincones de la denominada "Ciudad Heroica", que durante la segunda guerra mundial fue sitiada por dos años y cinco meses por los nazis, período en el que murieron más de 1,5 millones de rusos, aunque el Ejército Rojo nunca cedió el control total de la ciudad, hoy con una población superior a los 5 millones de habitantes.
El mítico río Neva, que atraviesa los sitios y palacios más destacados de San Petersburgo, es custodiada por fuerzas del ejército y la policía local, quienes además del intenso flujo turístico habitual en esta época, el tramo final del verano europeo, redoblan esfuerzos ante el inminente comienzo de la cumbre.
Precisamente, las deliberaciones de los presidentes tendrán lugar en el Palacio de Constantino, o Palacio de los Congresos, cuya construcción fue ordenada por Pedro I El Grande en 1720.
El palacio que está ubicado a unos 20 kilómetros del centro de San Petersburgo y es, según los organizadores, el "lugar ideal" para la reunión de los líderes del mundo, cuyas presencias estarán -como ocurre en cada Cumbre del G20.
El palacio Constantino fue construido en la costa del golfo de Finlandia, y era propiedad de príncipes y hermanos de emperadores.
Sus dueños fueron Constantin Pavlovich, primero, y más tarde Constantin Nikolaievich, por quien el palacio lleva su denominación actual.
La historia señala también que la Segunda Guerra Mundial destruyó la mayoría de la edificación del palacio a causa de los incendios y los ataques de las bombas que amagaron con convertir al lugar en un casco de piedra.