La presidenta Cristina Fernández afirmó ayer en la localidad de Río Turbio que cuando culmine su mandato como jefa de Estado va a volver a Santa Cruz “de donde me fui y de donde salí”, al tiempo que destacó el cambio que registró el país y esa provincia durante la gestión kirchnerista, en un mensaje de campaña electoral local.
Acompañada por la ministra de Desarrollo Social y candidata a gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, y por su hijo y postulante a diputado nacional por esa provincia, Máximo Kirchner, además del secretario Legal y Técnico y candidato a vicepresidente del FpV, Carlos Zannini, la mandataria habló por primera vez de su futuro cuando deje el poder.
“Pero vuelvo a otra Santa Cruz”, subrayó y recordó que el ex presidente “Néstor (Kirchner) primero como gobernador les dio gas y mas tarde el gasoducto”.
La Presidenta aprovechó el acto en que se puso en marcha la central termoeléctrica a carbón de Río Turbio para resaltar que “Santa Cruz adquirió protagonismo, desarrollo y crecimiento” durante la gestión kirchnerista.
Tras rendir homenaje a los mineros fallecidos en un accidente en 2004, lanzó un mensaje conciliador a los trabajadores que en su momento realizaron piquetes contra el gobierno kirchnerista.
“Algunos creen que discutir y debatir es malo. No, es parte de la vida democrática, cuando lo hacemos en forma armoniosa”, señaló y recordó “a los compañeros manifestando en Casa de Gobierno cuando Néstor era gobernador, y acá estamos todo unidos por un objetivo en común, cumpliendo un sueño”.
Durante el acto realizado en el Centro de Deportes Invernales Valdelen, la mandataria evitó referirse a las próximas elecciones en las que el 25 de octubre se elegirá a su sucesor en la Casa Rosada pero hizo proselitismo local.
En un discurso de 30 minutos difundido por la Cadena Nacional número 35 del año, recordó que “cuando vine en 1978 no había rutas, venías por ripio como podías, no había calefacción a gas, para los que no se acuerdan, antes de ver Río Turbio veías una nube negra en el camino, recién después debajo de la nube estaba el río. Néstor como gobernador les dio gas, más tarde gasoducto”.
En este contexto también recordó que Kirchner, cuando se hizo cargo de la Presidencia: “Se tuvo que arremangar como se arremangó aquí en Santa Cruz” y “sacó adelante a la patria”.
Una central que genera polémica
La puesta en marcha de la primera turbina de la Central Termoeléctrica de Río Turbio que realizó la presidenta Cristina Kirchner en la provincia de Santa Cruz quedó envuelta en un sinnúmero de dudas, no sólo por el combustible que la va a alimentar, sino también por cuestiones ecológicas.
Cuando la central esté funcionando a pleno le incorporará al sistema eléctrico interconectado nacional un total de 240 megavatios, que según dijo la Presidenta “representan el consumo de Formosa, Salta, Jujuy y Santiago del Estero”.
Desde el Ministerio de Planificación se sostuvo que la obra funcionará solamente con el carbón que se produce en los yacimientos de dicha cuenca.
En tanto, fuentes relevadas entre los contratistas han hecho saber que la central está preparada para funcionar también con gas, ante la eventualidad de que las extracciones de carbón no alcancen para alimentarla, algo que el Gobierno niega, ya que dice que el gas sólo se utilizará para ponerla en marcha como se hace “cuando se intenta prender el carbón para un asado”.
Oficialmente, se informó también que la obra se completa con con una subestación transformadora y con una línea de transporte de alta tensión entre Río Turbio y Esperanza y que se trata de una inversión de 1.929 millones de dólares.
Dicho monto se conforma con U$S 754 millones para la construcción de la usina, otros 1.072 millones destinados a la recuperación del yacimiento y de 103 millones dólares más en las líneas de transmisión.