Trabajadores estatales de la provincia de Santa Cruz se manifestaron ayer en Río Gallegos al grito de "que se vayan todos" y "queremos cobrar", en distintas protestas por el pago de salarios y aguinaldos frente a la Casa de Gobierno provincial y ante la residencia de la gobernadora Alicia Kirchner.
Miles de empleados judiciales, de la salud y de la educación, entre otros sectores, confluyeron en la intersección de las calles Kirchner y San Martín de la capital provincial para marchar entonando cánticos y portando carteles con leyendas contra la corrupción, ante una extendida presencia policial.
Fueron tres manifestaciones separadas a lo largo de la jornada, la primera protagonizada por los sindicatos de la Mesa de Unidad Sindical, la Asociación Docentes de Santa Cruz (Adosac), Judiciales, Asociación Profesionales de la Salud (Aprosa) y adherentes, Viales y Municipales, que hasta hoy no cobraron sus salarios de noviembre.
Por los mismos motivos, aunque por separado, marcharon los gremios que nuclean a los trabajadores de la Sanidad (ATSA), Televisivos (SATSaid), Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y Asociación del Personal de la Administración Pública (APAP), a los que se unieron la UTA, Camioneros y la UOCRA.
Fuentes gremiales informaron que uno de los manifestantes "perdió un ojo y tiene el otro comprometido", otros dos sufrieron lastimaduras y un cuarto una herida sangrante en la cabeza sin gravedad, en todos los casos aparentemente por la explosión accidental de una bomba de estruendo frente a la residencia de la Gobernación que los propios manifestantes manipulaban.