Hay palabras que nacieron en la era de las redes sociales. Y si bien los jóvenes centennials nacidos después de 1995 las crearon y adoptaron fácilmente, no así el resto de los mortales, que aprenden día a día el significado de tan extraños términos.
"A cierta edad es muy importante tener un código propio, compartido por los pares y diferente de cómo hablan los padres, las figuras de autoridad, los docentes", reconoció a Clarín Santiago Kalinowski, director del departamento de Investigaciones Lingüísticas y Filológicas de la Academia Argentina de Letras. Las fuentes, a tono con la época, provienen de programas de TV y películas, videojuegos, youtubers, memes y hasta de las letras de temas de trap.
"¿Qué te pasó, viejo? Antes eras chévere", le dice un joven Bart a Homero en uno de los episodios de "Los Simpson". Para no terminar como el patriarca de la familia amarilla, compartimos el diccionario centennial actualizado.
Abeja. Apodo destinado a una persona que es considerada pesada o molesta. Vinculado a los insectos voladores.
ATR. A todo ritmo. Si bien ya existía, el cantante de cumbia Pablo Lescano le dio un nuevo impulso.
Ahre. Tiene dos significados. Por un lado, dar a entender que se está hablando de una exageración (por ejemplo: "¡Juego como Messi, ahre!"). Por el otro, designa a algo que no se tiene que interpretar de manera literal. En muchos casos, se deja el espacio a la duda para no exponerse ("Sos re lindo, ahre").
Nace de la unión de "Ah", interjección que denota sorpresa y "re", prefijo utilizado para la intensificación.
Bardear / bardo. Insultar.
Bro. Proviene del inglés (brother = hermano). Expresión que se utiliza para dirigirse a alguien. Puede ser mujer o varón. "Dale, salgamos, bro".
Bro, sos famoso. Se suele escribir estas palabras a aquel usuario que obtuvo éxito con un tweet y que generó mucha repercusión.
Btw. Es un acrónimo originario del inglés "by the way", es decir, "ya que estamos" o "por cierto". Se usa para cambiar de tema o recordar algo que justo vino a la mente en medio de una charla.
Colta. Cortala.
Cringe. Sentimiento de vergüenza ajena por el otro o la otra.
Crush. Enamorarse de otra persona. Proviene del inglés.
Dea. Las tres últimas letras de "ni idea".
De rúcula. Algo genial o espectacular.
Flama. Copado, buena onda, increíble.
Hater. Propio de Twitter. Usuarios que odian sin razón.
Lija. Hambre.
Manija. Quiere decir que la persona está ansiosa o desesperada por algún evento, en especial, por alguna película que se estrena en breve.
Milipili. Palabra compuesta por la unión de Milagros y Pilar. Se trata de un calificativo despectivo que se le da a una chica muy superficial, es decir, que expone en las redes sociales su vida, su ropa, sus productos y las marcas que usa.
Niño rata. Obsesionado por los videojuegos.
Normie. Palabra utilizada para designar a aquellos que les gusta todo lo que está de moda y van mutando según la presión social.
Previar. Hacer la previa, es decir, juntarse a tomar alcohol antes de salir a un boliche. ("Chicos, ¿hoy previamos?").
Same. Proviene del inglés y significa estar de acuerdo con lo que dice otro.
¿Sos joda? Es igual a "¿Me estás cargando?".
Temazo, temón, temaikén. Los términos se emplean cuando se escucha una canción que gusta mucho. La última palabra hace referencia al bioparque de Buenos Aires, que es, obviamente, similar a "tema".
Tincho. Proviene del apodo comúnmente asociado a Martín. Es el calificativo que se le da a un chico que ostenta su acomodada posición económica en las redes sociales. Por ejemplo, publica fotos en las que muestra sus vacaciones en lugares paradisíacos, su iPhone, sus abdominales marcados e, incluso, la práctica de rugby.