Desde hace unos años ha ganado terreno un paradigma que apunta a favorecer el contacto físico con los hijos, en particular cuando son bebés. En este marco, aparecen los defensores del porteo, esto es, de trasladar al pequeño sujetado al cuerpo del adulto con algún portabebé.
Por un lado destacan que esto tiene diversos beneficios. Pero por otro, advierten que hay que tener cuidado con el implemento que se utiliza, que debe ser acorde a la edad del bebé y respetar su postura fisiológica.
Criar con apego
Esta es la semana de la crianza en brazos, algo cada vez más promovido por quienes consideran que el contacto con el bebé aporta beneficios únicos. Es en este contexto que también ganan terreno conductas como el colecho, las que hubiesen sido muy mal vistas por nuestras abuelas. Para muchos se asocian a falta de independencia y "darles mañas".
Esto de llevar al bebé sujeto al cuerpo no es nada nuevo para comunidades como la boliviana e incluso se hacía así cuando no existían cochecitos.
Natacha Largayoli cargó a su hija desde el momento en que salió de la clínica después del nacimiento hasta un mes después de cumplir los dos años. Contó que tiene una desviación en la columna y por eso no continúa, pero que su esposo sigue haciéndolo.
Es la creadora de la organización Sabia Crianza, que capacita sobre este tema en Mendoza. Explicó que el porteo puede hacerse desde el primer momento aunque si se tuvo cesárea la mamá deberá esperar unos días. Podrá continuarse hasta que el niño ya no quiera. "Se habla de que el porteo no tiene que ser sólo una herramienta para el transporte, está bueno también usarlo en la casa, seguir con tu rutina", explicó.
La Organización Babywearing International promueve el porteo. Desde allí destacan que gracias a esta práctica el bebé tiende a llorar menos, se favorece la lactancia materna y se mejora el desarrollo físico del niño. Además es beneficioso para el vínculo, el niño duerme mejor mientras que aseguran que además impacta a nivel gástrico, disminuyendo el reflujo y mejorando la digestión.
Natacha, quien ya tenía un hijo mayor, ve los cambios en su niña: "Es más segura, independiente. Cuando estás con tu bebé tanto tiempo le das seguridad", señaló. En cuanto al impacto sobre la columna de quien portea advirtió que hay estudios que han demostrado que desvía menos la columna que llevar al bebé en brazos porque distribuye mejor el peso respecto del cuerpo.
Aval médico
Pediatras y traumatólogos infantiles consultados consideraron que se trata de una práctica positiva.
El pediatra Daniel Miranda, miembro del Comité Nacional de Prevención de Lesiones de la Sociedad Argentina de Pediatría, destacó que favorece la relación vincular entre la tríada "bebé, madre y padre". Pero dijo que hay que tener cuidado de no hacerlo cuando se conduce o se va en un vehículo ni en el micro, ya que allí el niño debe usar la sillita correspondiente.
El traumatólogo Pedro Royo (Hospital Notti) marcó que cuando el niño todavía no puede sentarse hay que cuidar que lo que se utilice sujete su tronco y su cabeza, y que hasta los seis meses deben usarse los protabebés que van delante del cuerpo de quien portea.
Ergonómico
Hay algo fundamental y es elegir el portabebé adecuado para evitar causar daños. Desde Sabia Crianza destacan que hay que elegir un bortabebé ergonómico. Este es el que respeta la fisiología del bebé dado que sus huesos están el pleno desarrollo.
Hay dos etapas que determinan el tipo que puede usarse. Natacha detalló que la primera es desde el nacimiento hasta que puede sentarse y luego comienza la segunda.
En la primera puede usarse un fular o bandoleras. Es importante que el bebé tenga la espalda en forma de C y las rodillas más altas que la cola, apoyado sobre el cuerpo de quien lo portea. En la segunda etapa se puede usar bandolera o fular rígido, meh dai o mochila. Es importante una tela respirable, sin panel rígido detrás y que no deje las piernas del niño colgando.
Para el traumatólogo, Yamil Cuenca cuando el portabebé es comprado hay menos riesgo de errores que con los realizados en casa. Es importante que el chico no quede con la columna hacia adelante, atrás o un costado y que las piernas queden separadas, no envueltas. De estar en una mala posición puede ocasionar dolores lumbares, contracturas cervicales y en los bebés más chiquitos puede comprimir la zona axilar y provocar dolor en miembros superiores.
Actividad para hoy
Hoy, de 10 a 13, se realizará el Tercer Encuentro de Porteadores de Mendoza, cerca de los portones del Parque General San Martín, organizado por Sabia Crianza.
De manera gratuita se podrá acceder a una charla sobre la importancia del vínculo en los tres primeros años de vida, otro espacio para fomentar el juego entre padres e hijos y rondas informativas.