En menos de 24 horas prácticamente se esclareció el crimen de un joven de 20 años, ocurrido en los primeros minutos de ayer en Guaymallén. El presunto autor fue detenido rápidamente y anoche ya iba a ser imputado. Es el cuarto homicidio en época de cuarentena.
Misael Enrique Ontiveros perdió la vida en la puerta de su casa cuando recién había comenzado el miércoles. El muchacho se encontraba en calle Paula Albarracín al 1900 con un amigo y, repentinamente, aparecieron tres sujetos con los cuales la víctima ya había tenido algún tipo de conflicto.
Cruzaron apenas unas palabras hasta que uno de ellos sacó un arma de fuego y le disparó a Ontiveros. El agresor y los acompañantes escaparon, mientras los familiares de Misael, ya alertados por la detonación, salieron y lo encontraron herido. Sin esperar una ambulancia, lo subieron a un auto y lo trasladaron al hospital Central.
Allí los médicos confirmaron que el hombre había llegado muerto por una herida de bala en la axila izquierda.
Efectivos de la División Homicidios comenzaron a trabajar en la escena y el testigo presencial, un amigo del fallecido, les dio nombre, apellido y dirección del principal sospechoso como autor del disparo.
Con estos datos, la Policía fue al barrio Lihué pero no logró dar con el presunto autor. Las tareas de búsqueda siguieron y los efectivos llegaron al barrio 17 de Noviembre, donde un joven se escondía en la casa de su abuela. Se trata de Cristian Velázquez (18), alias "El Boliviano Junior", quien quedó detenido en la comisaría 25.
Prueba reveladora
Además de que al acusado lo señaló el testigo presencial, contra él los investigadores tienen un elemento irrefutable. En sus prendas de vestir se detectaron restos del pólvora tras el barrido electrónico, lo que indica que disparó un arma de fuego en las últimas horas.
Con esto y la declaración que lo incrimina, anoche el fiscal Flavio D'Amore procedía a imputarlo por homicidio agravado por el uso de arma de fuego, delito por el que será trasladado al penal. Al sospechoso, que tiene algunos antecedentes de cuando era menor, también le adjudicarían la violación de la cuarentena.
Al cierre de esta edición el fiscal resolvía además la situación de otro hombre involucrado, de 29 años, atrapado en la misma vivienda y que acompañó al presunto autor en el momento del hecho. Más allá de esto, no tendría participación criminal y sería liberado.
No está del todo claro el motivo del ataque fatal, aunque los pesquisas saben que entre los protagonistas había “viejas rencillas y problemas de barrio”, apuntó una fuente.
Cuarto homicidio en cuarentena
El asesinato de Ontiveros es el cuarto hecho de sangre en 19 días de aislamiento obligatorio. El crimen que abrió esta seguidilla ocurrió el domingo 22 de marzo y la víctima fatal fue Víctor Cariglio (70), atacado a golpes en su casa de Las Heras. En esta causa está detenido un conocido de la víctima, que lo habría matado para robarle.
El jueves pasado, en Tunuyán fue ultimado de una puñalada Gerardo Rivamar (49) durante una pelea en la que también hirieron a su hermano. Por el caso fue arrestado un joven de 23 años.
Esta semana también se cometió el tercer homicidio, que tuvo como víctima a Diego Ruiz (20) en Las Heras. El lunes en la tarde recibió un balazo efectuado por un hombre que está identificado pero que aún no ha sido atrapado.
