Se empieza a imponer, pero los comerciantes admiten que se vende poco porque el público aún desconoce que existe. Se trata de la ropa con protección UV cuya función es repeler los efectos nocivos de los rayos solares.
Este año, en las playas argentinas y chilenas muchos fueron los que optaron por esta indumentaria, sobre todo para cuidar a los más chicos de la familia o quienes tienen la piel más delicada.
Para Ignacio, por ejemplo, la ropa es totalmente recomendable ya que se la ha probado a su hijo con un resultado óptimo. “Funciona, no sé cuál es el fundamento pero funciona. Le he puesto a mi hijo una remera larga, tipo de surfer y la verdad es que te olvidás del protector solar”, indicó añadiendo que no es muy costosa.
Sin embargo, su uso no es generalizado. Gabriela, que es guardavidas en un club, dijo que si bien son útiles, los adultos todavía continúan utilizando la indmentaria tradicional. "Puede que haya algunos nadadores que utilicen este neoprene para el verano", dijo sin estar muy segura si se consigue este tipo de ropa para adultos. Lo cierto es que es una buena opción para el sol si hablamos de precios ya que una pantalla solar factor cuarenta de primera marca cuesta 380 pesos aproximadamente, mientras que una remera de niño con esta tecnología de protección en la indumentaria ronda los 800 y dura más que la crema protectora.
La dermatóloga Sonia Rodríguez Saá indicó que la indumentaria bien hecha protege completamente, sin que haga falta otra protección en la zona cubierta y que los pioneros en este uso son los australianos, quienes tienen un índice muy alto de cáncer de piel. De hecho, dijo que es de uso habitual entre los niños que van a la escuela. "Hay que observar en la etiqueta que diga cuál es el factor. Viene protección UV de 30, 40 y 50. Es una buena alternativa a los protectores solares", especificó la especialista. Aseguró que para quienes más recomiendan esta ropa es para los niños y para aquellos pasan mucho tiempo trabajando al aire libre. "Es ideal para aquellos que tienen exposiciones prolongadas. Para no tener que estar poniéndose crema todo el tiempo", describió Rodríguez Saá. Señaló que en los consultorios se hacen consultas pero que si bien no es una novedad a nivel mundial, en Argentina recién se está comenzando a usar".
En Cuyo Wind Surfing, de Godoy Cruz, informaron que tienen ropa tanto para adultos como para niños, pero en lo que va de la temporada estival sólo se han vendido diez prendas en total. "La ropa de los niños tiene un valor de 600 a 700 pesos mientras que para los adultos se consigue desde 1200".
