San Martín genera a diario casi 80 toneladas de basura que hoy tienen un destino incierto, ya que en medio del conflicto que Rivadavia mantiene con la Provincia, a raíz de la postergada habilitación del depósito en Vizcacheras para los residuos de torda la región, la comuna de Jorge Giménez se ha quedado sin lugar al que llevar los desperdicios del departamento y está apelando a ocupar terrenos informales.
Históricamente, San Martín ha descargado sus residuos en el basural municipal a cielo abierto de la calle Barrera, un enorme predio que en el último tiempo fue cubierto con tierra y cerrado, como parte del millonario proyecto financiado por el Banco Mundial, para abrir en las afueras de Rivadavia, una planta regional que concentre los residuos de los cinco departamentos.
Ese depósito regional fue construido en Vizcacheras, se ubica junto al actual basural municipal de Rivadavia y aunque la Provincia sostiene que la obra está terminada y en condiciones de comenzar a operar, el intendente Ricardo Mansur ha denunciado modificaciones presupuestarias al proyecto original y una serie de obras que no se han realizado; un déficit que asegura Mansur, compromete el cuidado del medio ambiente al que apunta el proyecto.
Así, con su propio basural cerrado y sin el depósito regional habilitado, la comuna de San Martín decidió arrojar las casi 80 toneladas diarias de desechos que genera el departamento, en un terreno al costado de la ruta 7 y cercano al río Mendoza, un predio que ya ha sido destino de eventuales descargas clandestinas de residuos, pero que ahora se ha convertido en un basural ilegal que no para de crecer.
"Entre los cinco municipios firmamos un acuerdo para llevar la basura a Rivadavia. El depósito se construyó y todos fuimos informados de las modificaciones al proyecto", comentó Darío Álvarez, jefe de Obras Públicas de la comuna: "Al mismo tiempo, en San Martín tapamos el basural y se levantó una planta de transferencia para procesar y desviar los residuos a Vizcacheras, pero nada de eso está funcionando porque Rivadavia no quiere habilitar la obra. Nuestros camiones no tienen dónde llevar la basura y mientras esperamos que el conflicto se solucione, hemos apelado a lo menos dañino para el ambiente: un terreno que si bien es vidriera de San Martín para los que viajan por ruta 7, ya estaba afectado por residuos clandestinos".
San Martín ya ha enviado notificaciones al resto de las comunas de la región, al gobierno de la Provincia y al de la Nación, señalando que se siente "víctima de un conflicto que no ha generado", que espera que se resuelva pronto y que se abran las puertas del depósito regional de Vizcacheras.
Con un presupuesto de 50 millones de pesos, la obra fue ejecutada por la empresa Tecsan SA, que ganó la licitación en 2012 y que administrará el depósito durante los tres primeros años, en los que cada departamento del Este pagará de acuerdo a la cantidad de basura que lleve y en este sentido, el cálculo indica que San Martín aportará el 63% de los residuos; Rivadavia el 18%; Junín, el 12%; La Paz, el 4% y Santa Rosa sólo el 3%.
Pero el intendente Mansur insiste en que hubo cambios claves al proyecto original: "Es insólito, en el proyecto hubo plata para remediar y tapar el basural de San Martín pero no la hay para el de Rivadavia, donde va a funcionar el depósito", señalaron en la comuna de Mansur.
Así, Rivadavia ha decido no habilitar el depósito hasta que no se comprometa el dinero para las obras que pide: una perforación de agua potable para parquizar el predio (tres millones de pesos); la construcción de una planta para tratar los líquidos que genera la basura ($1,5 millón); un camión para trasladar la basura desde La Paz y Santa Rosa hasta Vizcacheras y la remediación del actual basural municipal, ($3.150.000).
"Hay que firmar los convenios, hacer el decreto y con imputación de la plata, porque ya pasó que Rivadavia hace obras y la provincia nunca manda el dinero", ha dicho Mansur, que como presidente del consorcio de municipios integrantes del proyecto, asegura que nunca fue informado oficialmente de las reducciones al proyecto original.
Por ahora, nadie sabe cuándo se resolverá el conflicto que permita habilitar la planta, ponerla en funcionamiento y cerrar los basurales a cielo abierto que todavía tiene la región.
Para la Provincia, la planta está terminada
José Pozzoli, coordinación de la Unidad de Proyectos Críticos del Ministerio de Medio Ambiente, sostuvo que "mientras Mansur viola la ley ambiental con su basural a cielo abierto, al lado tienen una planta terminada que no quiere habilitar, lo que perjudica a toda la región". Pozzoli aseguró que
"Mansur ha estado siempre al tanto de las remodelaciones que se hicieron al proyecto" y agregó que el depósito "tiene ya su perforación de agua, que alcanza y sobra para la operación de la planta, con caudal suficiente para la forestación, los caminos y el relleno sanitario. La que pide Mansur no tiene sentido".
Sobre la remediación del basural, Pozzoli dijo que el convenio "está firmado y ratificado por decreto, aunque es difícil que la plata llegue este año. Lo que tiene que hacer Mansur es cerrar el basural, empezar a operar la planta que está lista y exigir que le manden el dinero, pero no tiene excusa para no habilitarla. La comuna está intimada y en mora porque corren los plazos de la empresa adjudicataria".