Ha causado revuelo en las redes sociales un inodoro diseñado para hacer que sea incómodo si alguien se sienta durante más de unos minutos en él.
Se trata del asiento Standard Toilet que está inclinado hacia abajo en un ángulo de 13 grados, según la BBC.
Su diseñador, Mahabir Gill, que ha presentado una solicitud de patente en Reino Unido, dice que la idea se le ocurrió cuando se detuvo en un viaje por carretera para ir al baño."Había una cola enorme", explicó. "Me preguntaba qué hacía la gente allí. Algunos salían con sus teléfonos móviles".
Gill dijo que se ha construido un prototipo del inodoro y que él mismo lo ha probado. Para él, el ángulo óptimo se sitúa entre 11 grados, donde permanecer sentado durante más de 15 minutos sigue siendo cómodo, y 13 grados, donde una persona se quedará como máximo de "cinco a siete" minutos.
Por otra parte, explicó que este diseño puede tener beneficios médicos y señaló un estudio que analizaba los riesgos de pasar demasiado tiempo sentado en el baño, incluidas las hemorroides.
Además, se precisa que acortar el tiempo que la gente pasa en el baño tiene como objetivo también aumentar la productividad de los trabajadores.
Por ello, la idea desató todo tipo de respuestas irónicas en las redes sociales. Algunos han bromeado diciendo que intentarán compensar la inclinación con algún tipo de almohadilla colocada encima de la taza para volver a nivelar el asiento.
Otro usuario de Twitter bromeó diciendo que podría aliviar los efectos de este inodoro sentándose al revés.
"Si es real, creo que es una representación perfecta del menosprecio que el capitalismo tiene por los trabajadores y por los seres humanos", dijo a la BBC Hilary Gardiner, que usa el nombre de usuario de Twitter @plume__.
"Los asientos de inodoro actuales tienen una superficie de asiento horizontal", explica la web creada con toda la información del diseño.
"Esto permite al usuario sentarse relativamente cómodamente y como resultado, un usuario podría pasar más tiempo del necesario sentado sin molestias a corto plazo. En general, no es deseable sentarse en el inodoro durante más tiempo del necesario".
El diseño inclinado podría ahorrar a las empresas miles de millones en horas desperdiciadas, afirman los creadores del Standard Toilet.
Los usuarios de las redes sociales también cuestionaron si las personas con problemas de espalda o rodillas podrían usar el baño, o las que padecen algunas afecciones intestinales como el síndrome del intestino irritable o la enfermedad de Crohn.
Sin embargo, Raymond Martin, director gerente de la Asociación Británica de Aseos, trató de defender el diseño, describiendo la reacción en las redes sociales como "un poco instintiva".
"La ligera inclinación crea un ángulo de ataque ligeramente diferente".
Otro usuario de Twitter muy versado en la historia de los inodoros señaló que no es la primera vez que se diseña un retrete inclinado.
Ya lo hizo hace 108 años la firma de accesorios de baño Twyfords. Woolliscroft ha publicado en internet algunos documentos que muestra los exóticos diseños de Twyfords.