Costos de la recuperación económica

La recuperación económica vendrá de la mano de la incorporación de nuevas tecnologías.

Costos de la recuperación económica
Costos de la recuperación económica

La situación de la economía argentina sigue siendo compleja, inmersa en una profunda recesión y sin muchas luces en el camino, salvo los que hayan comenzado proyectos modernos, pensados en el largo plazo y sin medir las circunstancias de la coyuntura. Es esta diferencia la que habrá que analizar en los próximos tiempos a medida que comience una recuperación  de la economía.

En tiempos turbulentos, muchos empresarios olvidan su principal rol, que es el de conducir una empresa para generar valor para ellos y la comunidad, mientras genera empleo genuino, comprometiéndose con la comunidad y el cuidado del ambiente. Muchos hoy argumentan que no les conviene invertir porque reciben más ganancias por colocaciones financieras mientras otros piensan que la crisis es una oportunidad para invertir y mejorar a efectos de estar mejor preparados para los tiempos futuros. Estas dos conductas alternativas son las que van a definir el panorama empresarial de los próximos cinco años en Argentina.

En los últimos días, Mendoza asistió a dos hechos que marcan parte de estas diferencias que estamos señalando. Por una parte, el cierre de la planta de La Campagnola en San Martín, que causó impacto por el efecto que estos anuncios tiene en estos días y por la tradición de la marca. No obstante, estas cosas no son casuales ni producto del último año sino una acumulación de cosas que terminan derivando en esta decisión que, por tratarse de la empresa Arcor, la mayor alimenticia de la Argentina, parece buscar otro tipo de efectos.

La empresa compró la marca y sus plantas industriales y era razonable esperar que en algún momento comenzara a concentrar operaciones. Arcor tiene en San Luis, en la localidad de Villa Mercedes, la planta de Bagley (un joint venture con la francesa Danone), donde fue trasladando líneas de producción buscando mayores niveles de eficiencia. A su vez, la planta de San Martín, que se instaló en ese lugar hace 70 años, cuando era una zona rural, hoy ha quedado rodeada de urbanización, sin posibilidades de expansión y con trabas para su funcionamiento por parte de vecinos y municipio. Quizás los trabajadores podían no saberlo, pero sindicalistas y funcionarios municipales no podían desconocer las circunstancias que rodeaban al  establecimiento.

La empresa ya había desmontado su línea de duraznos hace varios años y tercerizaba su fabricación en otros productores locales. Incluso tiene una planta de tomate en San Luis, donde solo envasa.  En Mendoza había quedado lo más inverosímil, ya que envasaban choclos, arvejas y jardineras, cuyos ingredientes no se producen en Mendoza y debían pagar altos precios de fletes para trasladar la materia prima a ser procesada. La concentración de actividades era inevitable y el momento elegido fue el ideal para hacerle pagar el costo de imagen a otros.

Por otra parte, asistimos a la inauguración de una planta moderna de procesamiento de papas para elaborar el producto prefritado y congelado. Este tipo de producto es muy consumido en las cadenas de fast foods así como restaurantes. Por sus características, calculan que el 80% se destinará a la exportación y un 20% al mercado interno, donde también los supermercados están atendiendo una demanda creciente de origen hogareño. Esta planta se generó con una inversión de 140 millones de dólares e incluye 2.000 hectáreas dedicadas a la producción de papas en Pareditas, San Carlos. Este proyecto contiene uno de los elementos más valiosos como el de agregar valor en la misma región a la producción primaria.

En los próximos años las empresas deberán afrontar un camino complejo, que les exigirá invertir en tecnologías duras y blandas (software de producción y sistemas de gestión industrial, administrativa y comercial) para poder mejorar la productividad de sus unidades industriales y estar a la altura de los desafíos que la competencia internacional impone. En el medio quedarán en problemas muchos trabajadores porque se necesitarán menos y porque la mayoría no están calificados para los nuevos empleos. Es aquí donde se requiere la visión estratégica de la clase dirigente para anticiparse  a los escenarios venideros y comenzar rápido la formación de los trabajadores para que no pierdan condiciones de empleabilidad.

De lo contrario los costos sociales serán muy altos.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA