En estos momentos que atraviesa el mundo las situaciones más cotidianas se ven trastocadas por la pandemia. Toda actividad que antes parecía normal y comprensible para cualquier ser humano, hoy tiene otros protocolos.
Según publica el portal de Radio Mitre, tal es el caso de una madre que debió ser separada de su hijo al nacer, ya que tenía coronavirus. Vanesa Muro (34) oriunda de Madrid, España, dio a luz a Oliver. Lo que estaría dentro de lo normal para toda madre es recibir en brazos a su pequeño ni bien es sacado del vientre materno. Pero nada resultó como esperaba para Vanesa.
Como el test de coronavirus le dio positivo a la mujer, apenas nació el bebé éste quedó sometido al protocolo para corroborar que no hubiera sido infectado mediante la placenta. A su vez su madre no pudo verlo durante diez días, hasta que se recuperó de la enfermedad y los nuevos tests dieron negativos.
Vanesa contó lo desgarradora que le pareció la experiencia, ya que no pudo tener ningún tipo de contacto, ni besar siquiera a su pequeño hijo. "Fue muy duro para mí", recordó.
Finalmente, la joven madre pudo partir a su hogar con Oliver, una vez que le dieron el alta. "Él te agarra el dedo, el pobre, y agarra el plástico, no te agarra a ti, pero bueno, ya es un día menos, hay que pensarlo así porque sino te deprimes", apuntó.
Inclusive, el protocolo también se activó para Oliver, quien al nacer también quedó aislado de todo contacto y a la espera de resultados de COVID-19. Una vez que los profesionales de la salud constataron que el niño no había contraído la enfermedad, lo colocaron en la misma Nursery que los demás recién nacidos.
"Parece una tontería, pero tenerlo aunque fueran siete plantas más abajo parecía que estaba más cerca que cuando estaba en mi casa y el niño en el hospital", sostuvo la mujer.