En diciembre le pasarán tres cosas a Alfredo Cornejo: dejará de ser gobernador, terminará su mandato como presidente de la UCR y asumirá como diputado nacional. Ningún radical cree que el mendocino vaya a ser uno más en la Cámara Baja. Por el contrario, sostienen que peleará por la presidencia del bloque. Pero el cordobés Mario Negri, que el domingo 27 será reelegido en su banca, se muestra confiado en conseguir el apoyo suficiente de sus correligionarios para continuar como conductor de esa bancada.
Esta será una de las disputas internas del radicalismo, que pasará de nuevo a ser oposición si finalmente Alberto Fernández vence a Mauricio Macri. La otra disputa interna será por la presidencia del partido, puesto que le interesa a otro gobernador, Gerardo Morales.
El jujeño fue reelegido por cuatro años más pero entiende que en un eventual gobierno de Fernández las cosas se le pueden complicar en la provincia, si la dirigente Milagro Sala recupera la libertad. En el radicalismo dicen que Morales necesita ganar protagonismo político saltando de la vicepresidencia, que ocupa actualmente, a la presidencia del partido, cargo en el que ya se desempeñó una década atrás.
En la Cámara de Diputados, Morales es un aliado de Negri, pero todo está por verse, una vez que se sepan los resultados de los comicios.
En on y en off
Según pudo saber Los Andes, Cornejo está dispuesto a pelear por la presidencia del bloque contra Negri, pese a que públicamente proyecta un futuro "probablemente como diputado raso".
"Me entusiasmo por el destino del país y no en forma mesiánica, voy a ser uno de los 257 [diputados] que trabajen en ese sentido", dijo el gobernador mendocino en una entrevista con Perfil publicada el último domingo.
Sin embargo, off the récord, quienes conocen a Cornejo ya anticipan hasta un eje de la eventual discusión interna: "Un radicalismo de gestión contra un radicalismo parlamentarista".
Además de tener a los mendocinos de su lado, Cornejo conversa con el radicalismo porteño que responde al histórico dirigente Enrique ‘Coti’ Nosiglia y en su entorno no descartan el apoyo de los diputados mestristas (cordobeses opositores a Negri). Pero de eso aún nadie habla.
La otra vereda
Si se proyectan los resultados de las PASO, el bloque de la UCR de la Cámara Baja pasará de 40 a 45 bancas, contando al catamarqueño Eduardo Brizuela del Moral, del monobloque Frente Cívico y Social.
En el entorno de Negri aseguran que el diputado por Córdoba está tranquilo y que trabaja en sostener la conducción del bloque con más de dos tercios de los diputados de su lado, es decir 30 de 45 apoyos.
"Mario tiene la confianza de buena parte de los diputados radicales porque ha conducido el bloque y el interbloque [Cambiemos] en momentos difíciles, escuchando a todos y con pragmatismo. Siempre en minoría. Ya le han expresado su apoyo y creen que debe continuar", dijeron.
De todas maneras, destacaron que Negri "está totalmente abocado a que Juntos por el Cambio haga la mejor elección posible en el país y en Córdoba, donde se busca superar la cosecha de las PASO".
Hace dos meses, la lista que encabezó Negri sacó el 43,05 por ciento de los votos contra el 24,28 por ciento de la del Frente de Todos, que lidera Eduardo Fernández, y el 17,51 de Hacemos por Córdoba (Carlos Gutiérrez).
En el entorno de Cornejo, a su vez, confían en que la lista que encabeza el gobernador de Mendoza revierta el virtual “empate técnico”, como definieron a la derrota en las PASO por muy escaso margen a manos de la lista del Frente de Todos, que encabeza la camporista Marisa Uceda.
El 11 de agosto la nómina opositora sacó el 43,27 por ciento contra el 42,04 por ciento de la lista del oficialismo.