El gobernador Alfredo Cornejo confirmó su intención de "protagonizar las reformas (nacionales) que debe encarar Cambiemos" en los próximos dos años. Con la vista puesta en las próximas elecciones presidenciales, consideró que estas transformaciones "deberán acelerarse" ya que "en 2019 la ciudadanía nos va a evaluar por los resultados" a diferencia de lo que ocurrió en 2017 donde "primaron las expectativas".
"Soy partidario de las decisiones fuertes de una vez. Hay que actuar con terapia de shock como yo hice en Mendoza. Necesitamos un tipo de cambio más competitivo porque hoy está retrasado. Yo propuse ser más ambicioso con la reforma laboral (porque) los convenios colectivos están pensados para Buenos Aires y en el interior cuesta sostenerlos", disparó en la edición del domingo del diario La Nación. Aunque -amortiguó- "ratificamos nuestra pertenencia a Cambiemos".
Como presidente de la UCR nacional, Cornejo remarcó que "entre las condiciones que puse al asumir la conducción del partido, fue la de dotar de mayor presencia política a nuestros gobernadores e intendentes".
Se desprende que 'puso' las condiciones a la dirigencia radical. Y que se autorreferenció al hablar de 'nuestros gobernadores' (tres), ya que encabeza la provincia de color radical de mayor volumen.
Ya al frente de la UCR, Cornejo recibió en Mendoza a un emisario de los intendentes radicales del Sur bonaerense que se vienen quejando por 'la falta de espacio' que les deja la gobernadora del PRO, María Eugenia Vidal, frente a sus pares del macrismo.
Son jefes comunales de la Sexta Sección bonaerense que incluye a once intendentes de los cuales siete son de la UCR (Alsina, Dorrego, Torquinst, Lamadrid, Puan, entre otros), aunque Bahía Blanca -la de mayor peso- está en manos del PRO.
El encuentro tuvo lugar antes de la licencia del Gobernador en Chile y fue gestionado por el senador nacional Julio Cobos (UCR).
En Buenos Aires la UCR tiene 41 intendencias y el PRO 23; contra 57 del PJ, 10 del massismo, una del socialismo y tres del vecinalismo.
Los radicales "aspiramos a tener más protagonismo en las deliberaciones de los problemas estructurales de Argentina", dijo por entonces Cornejo en Telam. "Nadie pretende redactar decretos en un sistema presidencialista, pero la UCR tiene mucho que aportar en la agenda del presente y en la del futuro", machacó.
En terreno nacional, el gobernador mendocino busca encabezar el reclamo radical contra los 'ninguneos' del PRO, dentro de Cambiemos. Aunque en el provincial, defiende el más estricto disciplinamiento en Cambia Mendoza, como reclamó al Partido Demócrata.
La reconfiguración de la relación interna que se negocia hoy dentro de Cambiemos entre sus dos principales socios -la UCR y el PRO- se produce en momentos de tensión a raíz de la privatización de las acciones estatales en Transener, dispuesta por el gobierno de Mauricio Macri y rechazada por la UCR.
Cornejo le reclama al gobierno nacional 'una respuesta fundada y por escrito', que se podría conocer esta semana. Es que mañana Macri -de regreso de su licencia- recibirá a su ministro de Energía, Juan José Aranguren como parte de la reunión de gabinete.
Si bien se abrió una nueva etapa interna en Cambiemos, las diferencias no muestran -por el momento- señales de salirse de cauce. Trascendió que -poco antes del encuentro en San Rafael- Cornejo le anticipó a Macri el contenido del documento con el que la UCR rechazó la privatización de Transener.
Un segundo ´punto de roce entre la UCR y el PRO parece aparecer tras la reciente firma del megadecreto presidencial que la Casa Rosada presentó como "desburocratizador". Pero que sectores alfonsinistas de la UCR consideran 'violatorio de derechos'.
Y sobre el cual la oposición ya prepara recursos de inconstitucionalidad. Estos se presentarán ni bien se termine la feria judicial en febrero tanto desde el Frente Un País (Margarita Stolbizer) como desde Unidad Ciudadana (Axel Kiciloff) con el argumento de que "un decreto no puede derogar 19 leyes".