En el marco del festejo por los cien años de una escuela de La Primavera, en Tunuyán, el gobernador Alfredo Cornejo anunció ayer que saldarán la deuda que el Estado tiene con unos 16 mil docentes, a quienes en los últimos nueve años se les ha reconocido el ítem 'zona' en lo normativo, pero aún no lo perciben en sus sueldos.
Esta decisión viene acompañada de una reestructuración más profunda sobre este incentivo económico que -originalmente- está vinculado con la accesibilidad al lugar de trabajo.
“Queremos a los mejores docentes en lugares como éste, donde se hace patria. Lejos del microcentro, donde necesitamos que los chicos y sus familias se queden y tengan mejor calidad de vida e igualdad de derechos”, resaltó Cornejo, en medio de los festejos por el centenario de la escuela 1-196 Ignacio Álvarez, de Tunuyán.
Esta ‘recategorización’ del ítem zona es una medida que es demandada desde hace décadas. Incluso, tiempo atrás se creó una comisión mixta para discutir propuestas del cambio, pero esta se congeló y se volvió a activar en distintos momentos, por distintas gestiones educativas.
Desde que se instaló este incentivo económico, no ha tenido más modificación que un recálculo del radio, implementado en 2012 y que incrementó diez puntos el ítem en todos los establecimientos educativos provinciales.
Sin embargo, esto no contribuyó a realizar un sistema más justo en función del desarrollo poblacional de cada territorio y las nuevas realidades del contexto donde están inmersas las escuelas, sobre todo las de poblaciones más vulnerables.
“Mientras no sea un retroceso en nuestros salarios, creo que todos estamos de acuerdo en que este ítem debe ser actualizado. Hay escuelas en Tunuyán donde tienen el 80% de zona porque antes eran inaccesibles y hoy pasa el colectivo por la puerta”, acotó la maestra Mariela D.
Por su parte, un profesor de Biología de Guaymallén, Leandro Díaz, opinó que la modificación es necesaria, pero “no tenemos información clara sobre cómo se haría. Hay que atender la situación de quienes trabajan con comunidades difíciles, que hoy no tienen zona, como escuelas de La Favorita o del barrio San Martín”.
El Gobernador dijo que trabajan en la revisión del “criterio zona para adelante” y que esto derivará en una recategorización de las cerca de 1.500 escuelas provinciales. “Lo vamos a hacer con un criterio de estricta justicia, pero fundamentalmente pensando en que la tarea en escuelas rurales, albergues y urbano marginales debe ser reconocida”, acotó.
Por su parte, Dalmiro Garay, ministro de Gobierno, Trabajo y Justicia, llevó tranquilidad a los docentes y aseguró que la medida será en adelante y que “ninguno va a perder la zona que hoy cobra”.
Sebastián Henríquez, secretario general del SUTE, dijo que están de acuerdo en “que se subsanen las injusticias, pero que se rediscuta en el ámbito de la comisión mixta que ya tiene un camino realizado”.
Saldar la deuda
Cornejo habló de “desarmar el lío” que dejaron las anteriores gestiones, a las que culpó de que hoy el Estado deba 700 millones de pesos a unos 16 mil docentes. “Les reconocieron administrativamente el ítem, pero nunca se les abonó”, agregó. Muchos de estos docentes afectados iniciaron reclamos judiciales.
“Tarde o temprano vamos a tener que afrontar este costo y preferimos llegar a un acuerdo. Vamos a pagarlos a través de una ley, donde la Legislatura nos autorice”, aclaró Cornejo y Garay agregó que esto fue propuesto al SUTE a principios de año y el gremio se negó a aceptar.
“No es es que no aceptamos esto, es que la propuesta oficial fue extorsiva y nos exigía aprobar todo o nada. Y las escuelas se negaron a aceptar el 17% de aumento”, explicó el dirigente gremial, quien apuntó que -además de saldar la deuda- el Gobierno debe empezar a pagar la zona reconocida en esas escuelas.