Alfredo Cornejo terminará su gestión con más del 90% de los proyectos que presentó en la Legislatura aprobados. Son menos de los que enviaron sus antecesores en el cargo, pero en el Gobierno destacan la calidad por sobre la cantidad, es decir la relevancia de varias de estas iniciativas porque sostienen cambios de fondo en el Estado.
En total, el mandatario envió 187 proyectos, de los cuales 102 ingresaron por Diputados y el resto por el Senado. Fueron 173 los que se aprobaron, un 93%.
En cuanto a sus tres predecesores, Francisco Pérez presentó 226 proyectos; Celso Jaque, 264; y Julio Cobos, 276 iniciativas. Sin embargo, en el Ejecutivo actual destacan que la mayoría de ellos fueron proyectos menores como ratificaciones, adhesiones a leyes nacionales o incluso transferencias de inmuebles, entre otros.
Si bien Cornejo tuvo prácticamente mayoría en las dos cámaras, desde Casa de Gobierno señalaron que "siempre se buscó sacar las leyes, sobre todo las más importantes y que implicaban reformas de fondo, con el acompañamiento de la oposición".
Lisandro Nieri, ministro de Gobierno, repasó los proyectos más importantes. Nombró primero a las reformas judiciales como un abanico de proyectos que "cambiaron estructuralmente el trabajo de la Justicia, otorgando más celeridad y agilidad a todos los procesos". Y también puso en énfasis en la Oficina de Conciliación Laboral que "redujo en un 60% la litigiosidad".
Además puso en valor la correspondiente implementación de cada Ley aprobada. "En otros gobiernos lo que se aprobaba no siempre se implementaba. Acá los resultados en la Justicia ya están a la vista, tenemos los avances que pretendíamos", destacó Nieri.
También puso en relieve otro tipo de proyectos que también han producido "cambios de fondo" en la administración del Estado. Aquí enumeró la Ley de Movilidad que dio -entre otras cosas- un marco regulatorio de las plataformas electrónicas como Uber; el registro provincial de huellas genéticas; el Ítem Aula y el Ítem Zona en educación; el nuevo régimen de concursos para el ingreso y promoción en la Administración Central; el Código Contravencional; y la ley de Extinción de Dominio.
"Cornejo tuvo un plan de Gobierno que puso en práctica estos cuatro años; creemos que esta gestión tuvo la capacidad de ejecución, de lograr los objetivos. Con proyectos compactos para desarrollar se requirió de la Legislatura para aprobarlos, pero luego -insistió - se aplicaron e implementaron, porque ponerlos en funcionamiento es difícil".
Los que no avanzaron
Respecto a los que quedaron en el camino, Cornejo no pudo avanzar con la ampliación de la Suprema Corte, que se frenó en Diputados.
Otro proyecto que quedó cajoneado por falta de acuerdos fue la regulación del ejercicio de la abogacía y la procuración, que proponía tomar un examen a los egresados antes de recibir la matriculación del Colegio de Abogados.
Si bien estas iniciativas no están ahora en la agenda inminente de la Legislatura, en el futuro podrían retomarse. Es el caso de la reforma a la ley de Administración Financiera para renegociar la deuda, el llamado "roll-over" que el peronismo le rechazó al Gobierno este año. La idea es que con esta reforma, el Ejecutivo de turno no deba negociar esta herramienta con la oposición cada año.
A la corta lista de fracasos legislativos de esta gestión hay que sumar los tres proyectos de obras que necesitan financiamiento de organismos multilaterales. Son el acueducto ganadero de La Paz, la doble vía en Rivadavia y el Girsu (residuos sólidos urbanos).
En tanto, hay otros proyectos presentados por el Ejecutivo que aún no han sido tratados, como transferencias de inmuebles; la ampliación de la competencia de la oficina de sumarios; la ampliación del área protegida del parque Aconcagua; y la creación de la Dirección de Control de Eventos y Locales de Esparcimiento.