Una corriente política sostiene que la delimitación de un enemigo claro, al cual poner en la vereda de enfrente con la intención de diferenciarse, es imprescindible para la definición propia. Sirve para echar culpas y para visibilizar por qué pasan las cosas tal como suceden. Así, el pensamiento parece dividirse en dos y obliga a tomar una posición.
Pero lejos de los libros y las corrientes teóricas, la realidad política de todos los días, que se recarga cada vez más con el calor electoral de este año, parece demostrar esta premisa. Esta vez es la Unión Cívica Radical (UCR) la que se vale de este recurso de construcción de un enemigo público que se para del otro lado.
Este antagonista quedó al descubierto en las acusaciones que se escucharon en los últimos días. El responsable de motorizar las jugadas "contra" el gobernador, Alfredo Cornejo, no es tanto la oposición en su conjunto ni el peronismo como partido mayoritario, sino que el enemigo es el kirchnerismo.
"Es el único sector que tiene una estrategia clara y concreta: que le vaya lo peor posible a Cornejo y a Macri", se escucha en el oficialismo.
Ya sea que se trate de una estrategia electoral, o simplemente de una lectura política, lo cierto es que en los últimos tiempos, a la hora de referirse a la oposición, el Gobierno prefiere cargar las tintas sobre el sector que sostiene a la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner.
"El kirchnerismo le marcó la cancha al justicialismo"
Así quedó demostrado esta semana, cuando el Gobernador enfocó responsabilidades al referirse a la citación y cuestionamientos que hicieron desde la Legislatura al secretario de Cultura, Diego Gareca.
“Es una comisión (la encargada de hacer la interpelación) que la maneja el kirchnerismo y el FIT. Son los mismos que estuvieron en asamblea en Vendimia y que durante cuatro horas insultaron al presidente Macri. Son los mismos que gritan en las manifestaciones del 24 de marzo: 'Macri, basura, vos sos la dictadura'”, acusó Cornejo el lunes.
Anteriormente, el Gobierno responsabilizó al kirchnerismo de decir que “no” a la reforma de la Constitución de Mendoza. La decisión fue anunciada la semana pasada por el conjunto del Frente para la Victoria (FpV), que se reunió y comunicó que no iba a acompañar.
Esto obligó a que al día siguiente, en la Legislatura, el oficialismo anunciara el fin del intento reformista de este año. Pero el radicalismo, lejos de ver una reorganización opositora, focalizó: “El kirchnerismo le marcó la cancha al justicialismo”.
Lo que dicen en la otra vereda
El enfoque que hace el oficialismo en el kirchnerismo, a la hora de referirse a la oposición, no pasó desapercibida y llamó la atención de varios, sobre todo en el Frente para la Victoria, que también hacen sus interpretaciones. “Es un intento lineal de identificar al peronismo con el kirchnerismo”, respondieron.
Los que abonan esta teoría dicen que la ex presidente tendría, en nuestra provincia, casi el 40% de imagen positiva y casi el 60% de negativa.
El análisis apunta que la intención es identificar al conjunto opositor sólo en el kirchnerismo, que carga con una imagen negativa alta, aunque la positiva también es alta.
Otra visión interpreta que Cornejo está en el mismo tren comunicacional que Macri y María Eugenia Vidal, gobernadora de la provincia de Buenos Aires. “Es la polarización que les propone Durán Barba (consultor y asesor político). Si uno sigue todos sus discursos, hablan del kirchnerismo, con todo el bagaje que tiene para la gente. Pero la realidad indica que el kirchnerismo, dentro de los bloques legislativos que tiene acá el Frente para la Victoria, es absoluta minoría”, señalaron en la Legislatura.
"El Kirchnerismo no tiene ambigüedades"
En esta conceptualización se enmarcó el diputado provincial, Lucas Ilardo, de La Cámpora. “En una lectura política, hay una decisión de alineamiento de Cornejo con Macri. Hoy, Cristina es la persona que más mide en el país y en el peronismo, y la única que se enfrenta a la política de Macri”, señaló el legislador, haciendo uso de la misma estrategia: vincular al gobierno provincial con el nacional.
El diputado nacional kirchnerista Guillermo Carmona aportó su interpretación: “El peronismo hoy es la oposición y, dentro del peronismo, el espacio que no tiene ambigüedades es el kirchnerismo”.
La reunión del BID se hará en Mendoza el año próximo
“Mendoza será sede de la próxima Reunión Anual del BID en 2018”, anunció ayer a la mañana el gobernador Alfredo Cornejo. El mandatario viajará hoy a Asunción del Paraguay para participar en la 58 Reunión Anual de la Asamblea de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Se llevará a cabo en el Comité Olímpico Paraguayo, donde además se desarrolla la Trigésima Segunda Reunión Anual de la Asamblea de Gobernadores de la Corporación Interamericana de Inversiones.
El evento se realiza desde ayer hasta el domingo y congrega a los principales actores involucrados en el desarrollado económico de América Latina y el Caribe. Se estima la presencia de alrededor de 387 instituciones, entre públicas y privadas, y la asistencia de los 48 países que integran el BID.
El lanzamiento oficial de Mendoza como la sede de 2018 será mañana.
En cuanto al anuncio, Cornejo explicó que se trata de “un trabajo que venimos haciendo con el Ministerio de Hacienda de la Nación. Se lo pedimos como un evento para la provincia. Es de gran relevancia para el país. Atrae a muchos bancos, privados y públicos; genera turismo”.
La noticia fue dada a conocer en abril de 2016, cuando 48 países dieron su voto de forma unánime, para que así fuera, durante el encuentro del BID de ese año. La Argentina fue elegida en dos oportunidades para ser sede de la Asamblea. La primera vez fue en 1962 y la segunda en 1996.
El Gobernador indicó que será de gran trascendencia para la provincia. “Es un encuentro muy grande que reúne por lo menos a entre 1.500 y 2.000 personas. Es decir que en marzo de 2018 vamos a tener una gran afluencia de gente, que es la época en la que cae la temporada turística después de Vendimia”.
Un frente diverso
A la hora de hablar del Frente para la Victoria, se suele usar como sinónimos al peronismo o justicialismo, aunque en realidad no son lo mismo.
El FpV surgió en 2003 con la candidatura de Néstor Kirchner, con la intención de albergar a distintos sectores y partidos que, con el tiempo, se fueron diferenciando.
El conglomerado de partidos y agrupaciones es sostenido por el Partido Justicialista, el principal sello en cantidad de militantes y dirigentes. Pero las circunstancias actuales marcan que el peronismo ortodoxo busca alejarse de la figura de Cristina Fernández, quien a su vez no se identifica con muchos de los actuales referentes partidarios.
Con esta diferencia marcada, dentro del frente hay otras agrupaciones que se identifican con la ex presidente y se reivindican como kirchneristas. Entre ellos, la principal es La Cámpora, pero también están el Movimiento Evita, Nuevo Encuentro y otras.
En Mendoza, los referentes más cercanos a este costado K son el diputado provincial Lucas Ilardo y Patricia Galván; los senadores provinciales Luis Böhm y Gustavo Arenas. A la lista se suman la senadora nacional por Mendoza, Anabel Fernández Sagasti y los diputados nacionales Alejandro Abraham y Guillermo Carmona.
