Aunque Independiente perdió anoche 2-1 en su visita a Fortaleza, el triunfo conseguido en el duelo de ida le permitió pasar a la próxima instancia de este certamen y sigue soñando con alzar un trofeo internacional.
El Rojo llegó a Fortaleza con la intención de no ser dominado y en buena parte del primer tiempo lo consiguió, aunque dejó de lado sus pretensiones ofensivas en pos de cubrir las inmediaciones del arco de Martín Campaña. Sin embargo, ni siquiera eso fue garantía para sostener la ventaja que había conseguido en el duelo de ida. En la segunda incursión ofensiva seria del conjunto brasileño, Fabricio Bustos le cometió penal a Osvaldo y Juninho anotó.
El equipo argentino intentó con algún remate de Leandro Fernández, pero lejos estuvo de incomodar a Felipe Alves.
En el complemento se encendió el encuentro por las obligaciones del equipo carioca y la decisión de Independiente de no dejarse atropellar. El juego ganó en vértigo y la pausa ya no fue una constante a lo largo del capítulo.
Fortaleza fue muy profundo desde la velocidad de Osvaldo para ganarle en el mano a mano a Bustos y paralizar los corazones rojos. En el otro arco, algunos intentos terminaron con buenas intervenciones de Felipe Alves.
El Rojo estaba decidido a buscar el empate y asumió riesgos. Ni siquiera cuando llegó el segundo cachetazo cambió su intención.
El premio llegó sobre el final, cuando una gran jugada colectiva finalizó con un remate de Bustos que se desvió en un rival y fue a morir dentro del arco. Fue delirio en Avellaneda y la posibilidad de seguir creyendo en hazañas rojas.