Estudiantes de La Plata lo dio vuelta esta noche sobre la hora el partido a Santamarina de Tandil y lo venció 2-1, en Sarandí, para clasificarse a los 16avos de final de la Copa Argentina.
Martín Michel había puesto en ventaja al líder del torneo de la Primera B Nacional a los 44 minutos del primer tiempo, pero el equipo platense lo revirtió con dos goles de Guido Carrillo, a los 38 y a los 47.
Los dirigidos por Gabriel Milito se medirán en la próxima fase con el ganador del cruce entre San Martín de San Juan y Estudiantes de Caseros.
La diferencia de jerarquía entre los dos conjuntos se puso de manifiesto al final y al comienzo del partido, especialmente, cuando la producción de ambos era despareja y "El Pincharrata" acosaba desde las bandas al arquero Leandro Requena, aunque no conseguía meterla entre los tres palos.
A los 7 minutos de juego, Ezequiel Cerutti desbordó por derecha y tiró un centro rasante que Juan Sánchez Miño remató desviado, desde una posición inmejorable. Doce más tarde, Luciano Acosta disparó de media distancia por arriba del travesaño, y a los 34 filtró un pase para el mismo Cerutti, quien intentó definir sutilmente de cara al gol, sin poder sortear el achique de Requena.
Una merma en la intensidad de Estudiantes dio lugar al primer contragolpe de Santamarina, a los 37, aunque Martín Michel lo culminó con un tibio remate, fácil de controlar para el arquero. No obstante, a los 44, el mismo Michel se adueñó en las inmediaciones del área de un rechazo corto de Sebastián Domínguez y conmovió al "León", marcando el 1-0 con un tiro esquinado, justo antes del descanso.
Si bien Estudiantes siguió manejando la pelota, tenía pocas ideas claras, y cuando llegaba lo hacía de forma precipitada, por puro ímpetu, como a los 4 minutos de la etapa, con un bombazo de Leonardo Jara que pasó cerca.
Santamarina contó con una chance propicia para ampliar la diferencia a los 15 porque el ingresado Fernando Telechea escapó en velocidad y quedó cara a cara con Agustín Silva, aunque disparó nada más que cerca de la base del poste izquierdo.
El cuadro platense presionó entonces hasta el final y encontró el premio. A los 33, generó una situación de verdadero peligro con un centro desde la derecha que provocó una mala salida de Requena y un cabezazo de Jara que estuvo a punto de entrar, despacito, sin suerte.
El suspenso y los centros no daban tregua y los 38 el que se elevó para impactar de cabeza fue Carrillo; el balón rebotó en el caño derecho y fue a parar al interior de la red.
El golpe anímico fue fulminante y Estudiantes lo vislumbró. En el epílogo pudo repetir una vez más la maniobra, antes de que el árbitro marcara el final del tiempo reglamentario; el pie derecho de Cerutti envolvió la pelota con el pie derecho para mandarla a las alturas y allí volvió a imponerse Carrillo, quien pudo haberse despedido de la camiseta rojiblanca con el gol del triunfo.
