Pasó la primera semana de atención presencial de los Tribunales en Mendoza en tiempo de pandemia y la polémica está en la escena. Mientras hay personal que se queja de las condiciones de higiene en las instalaciones y el gremio se manifiesta en contra del regreso a la actividad, fuentes oficiales aclaran que se cumplen las exigencias sanitarias para trabajar y que no faltan los insumos.
Tras más de 50 días de cuarentena en la provincia, era todo un desafío volver a abrir las puertas de la Justicia. Es que, más allá de la gran cantidad de audiencias y trámites que se resolvieron de manera virtual desde el 20 de marzo en adelante, muchos esperaban poder concurrir al Palacio Judicial, a los juzgados de Familia y a las Cámaras Civiles para mover expedientes.
Era habitual, antes del Covid-19, ver gran cantidad de gente circulando por esos pasillos, lo que ahora cambió drásticamente por el pedido de distanciamiento social. Actualmente se concurre según la terminación del DNI.
"Es clara la posición de nuestra asociación gremial en cuanto a que rechazamos la decisión de abrir el sistema judicial, a excepción de problemáticas específicas como libertad, violencia de género y alimentos. A nuestro entender, la apertura total responde más a presiones económicas que a verdaderas razones sociales. No están dadas las condiciones", sostuvo Carlos Ordóñez, titular del gremio de los empleados judiciales.
A esta posición se suma una persona que se desempeña en Tribunales y expresó: "Esperemos que con el paso de los días la situación se normalice, pero ese no era el camino; era al revés, primero garantizar las medidas de higiene y después arrancar".
Su reclamo fue puntual: "Trabajo con los expedientes; en estos días los ordenanzas los traían a la oficina pero sin usar guantes, sólo venían con tapabocas. Además, el protocolo dice que hay que desinfectarlos con un líquido especial y manipularlos recién 96 horas después. Y la verdad es que ese producto no lo tenemos".
En su edición digital, Los Andes publicó el lunes sobre este panorama en el primer día de atención y el enojo por la falta de elementos de higiene y baños clausurados en el Palacio. Voceros del Poder Judicial reconocen que hay dos sanitarios que están en mantenimiento, pero sostienen que los insumos se han entregado en cantidad. Por ejemplo, barbijos, alcohol en gel, jabón líquido y máscaras.
También “se han repartido jabones y toallas de papel en todas las oficinas; no se colocan en los baños porque se los terminan robando”, aclararon.
“Nos han dado un jabón en pan, el clásico, pero ese hay que compartirlo y no es lo que se aconseja. Se necesita el jabón líquido”, contestaron los empleados.
"Se nota el esfuerzo por dotar de los elementos de bioseguridad, pero algunas cosas faltan. Hay que decir que existe un número importante de órganos jurisdiccionales donde no se respeta la distancia social. Miembros de nuestra comisión directiva recorren diariamente distintos edificios y advertimos que en una oficina fiscal se tomaba declaración a un aprehendido sin que éste ni el policía que lo custodiaba tuvieran barbijos", remarcó Ordóñez.
Respecto a las diferencias en cuanto a las medidas adoptadas en una sede o en otra, llegó un reclamo desde Minoridad y Familia por la ausencia de termómetros láser para tomar la temperatura en los primeros dos días, cuando en el Palacio esto estuvo desde el mismo lunes.
"En varios edificios no hay condiciones adecuadas de ventilación; uno es el Juzgado de Familia de Rivadavia. Hay problemas estructurales que ahora se agudizan en pandemia y hablan a las claras del deficiente presupuesto para la Justicia", agregó el gremialista.
“Existen lugares en los que es imposible el respeto a la distancia social sino se disminuye considerablemente el número de personal que trabaja en forma presencial. Esto ya lo solicitamos”, insistió.
“Recibí barbijo y alcohol en gel. Las oficinas están limpias, pero las condiciones no son óptimas. Faltan algunos detalles y esto preocupa en este contexto tan delicado”, resumió otro empleado judicial.
Ultimátum
Desde el gremio manifestaron que, si estas dificultades no se corrigen, tomarán medidas a fin de "proteger la salud de los trabajadores y trabajadoras judiciales". "Insistimos que en estos momentos la mayor tarea del Poder Judicial debería ser defender la salud y la vida de todos los mendocinos, lo cual no se hace con la gran circulación de personas que genera la apertura", finalizó Ordóñez.
Altas fuentes de la Justicia destacan que en la primera semana se notó la disminución de gente en los Tribunales, a partir del ordenamiento según DNI para realizar trámites y el previo otorgamiento de turnos. Respecto al distanciamiento, hay sectores donde se han colocado paneles para no permitir el contacto entre personas.
