Hoy, desde las 9.30, el Tribunal Oral N° 1, abrirá una nueva jornada del denominado “Megajuicio” y que desde su inicio, el 17 de febrero a la fecha, ya superó las 50 jornadas de debate.
En este juicio se han acumulado unas dos decenas de causas por delitos de lesa humanidad, y tiene, entre los más de treinta acusados a miembros de las Fuerzas Armadas, jefes y personal subalterno de la Policía de Mendoza, agentes penitenciarios y, como hecho inédito, a cuatro ex magistrados que hasta no hace muchos compartían tiempo y espacio dentro del edificio de los Tribunales Federales y ahora están acusados de haber omitido investigar los hechos denunciados durante la última dictadura militar.
Dentro del cronograma se han reiterado las visitas al D 2 del Palacio Policial. También se hicieron recorridas por el predio del VIII Batallón de Comunicaciones de Montaña y se visitó, sin presencia de la prensa, el interior de la cárcel de Boulogne Sur Mer, donde la mayoría de los detenidos estuvieron encerrados.
Últimos testimonios
Sin embargo, en la última semana hubo una novedad. Se realizó una audiencia domiciliaria. Así el Tribunal y las partes (sin público) se hicieron presente en el domicilio de Helga Markstein de Tenembaun, madre de la joven Gisela Lidia, cuya desaparición se remonta a abril del ‘77, cuando se realizó un “operativo” en distintas zonas del Gran Mendoza.
La finalidad fue la de detener a militantes de la Juventud Peronista y de Montoneros.
Gisela Lidia fue vista, por última vez, el 8 de abril cuando salió de su casa de Godoy Cruz rumbo a Las Heras. Tenía 22 años, era una excelente nadadora y representaba al Club YPF. Estudiaba ingeniería en la UTN y junto a su pareja -Alfredo Escamez-, se incorporó a la agrupación Montoneros.
Hoy la audiencia comenzará a las 9.30, donde el Tribunal escuchará más testimonios.